5 cosas que todos echamos de menos al volver de un viaje a Japón – Vol. 2. Un recorrido por la cultura y curiosidades japonesas.
¿Qué echas de menos al volver de Japón?
Una pregunta muy habitual que te suelen hacer tras volver de Japón y en base a la diferencia cultural y sus curiosidades es: «¿qué echas de menos?».
Japón es un país apasionante, desconcertante en ocasiones, de exageración total y de extremos inabarcables a nivel cultural. Japón no deja indiferente a nadie sea cual sea su motivación o interés en visitar el país (fliparás en todo puto lugar), cautivándote, apasionándote, impresionándote y enamorándote a cada paso… Japón te atrapará para siempre, siendo un país al que, seguro, volverás.
Y, por lo tanto, siempre habrá cosas que echas de menos, como yo, como todos… Tras haber realizado varios viajes a Japón (y los que me queden), y haber montado y asesorado muuuchos otros más viajes al país nipón (no olvides que soy profesional del turismo y asesor y consultor de viajes ;)), tengo muy claro qué echo de menos de Japón… Y, aunque obviamente y como siempre digo: NO CAMBIO ESPAÑA POR JAPÓN, sí que cambiaba con los ojos cerrados infinidad de aspectos y, ciertamente, hay muchas cosas que echo de menos desde el momento que abandono el país de forma inexorable en cuanto llego a España…
En todos los lugares hay excepciones y en todos los lugares cuecen habas… para lo bueno y para lo malo. Es decir; en todo momento, todos los puntos indicados respecto a las «5 cosas que echamos de menos al volver de un viaje a Japón» están expresados de forma subjetiva respecto a una base objetiva, y de forma general y genérica… Al igual que algunos son relevantes, otros son irrelevantes… Cada uno tiene sus experiencias y, obviamente, no tienes por qué compartir conmigo el 100%. Pero, estoy seguro, que si has viajado a Japón, te alinearás conmigo y también echarás de menos todo lo que voy a indicar a continuación ;).
Y, como siempre amigo lector y compi viajero… no olvides que esto es ViajerosAlBlog.com. Si buscas el minipost churrero de turno con 300 palabras, un par de párrafos y un par de fotos, repleto de información irrelevante (y subvencionada) donde no te cuentan nada pero está escrito para Google con mucho artificio vacuo… este ni es tu post, ni es tu blog… pero eso ya lo sabes, ¿verdad?, para todo ello… ya tienes muchos otros blogs donde elegir ;).
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 1. Cultura y curiosidades japonesas.
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 2. Cultura y curiosidades japonesas.
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 3. Cultura y curiosidades japonesas.
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 4. Cultura y curiosidades japonesas.
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 5. Cultura y curiosidades japonesas.
5 cosas que echas de menos al volver de Japón – Vol. 6. Cultura y curiosidades japonesas.
1. Los baños públicos de Japón.
Sí, los baños… no al baño como tal; wc, lavabo, etc (un baño es un baño y vale para lo que vale xD), ni tampoco a los wc futuristas limpiaojetes… Sino al simple hecho de la existencia de baños públicos en Japón que, además de ser posible de encontrar en muchos lugares, son gratis y, al loro: están limpios xD.
El hecho de que existan baños públicos en gran parte de las estaciones, al igual que en konbinis (en muchos solo para clientes), y parques públicos varios (e independientemente de baños en centros comerciales y demás)… supone una gran ventaja para los casos de necesidad que todos bien conocemos y que, seguro, habrás sufrido en alguna ocasión (sí, esos momentos que necesitamos un baño urgentemente, y no hay ninguno a nuestro alrededor xD). Además, generalmente son gratuitos (¡yo nunca he pagado en ningún baño público en Japón!), generalmente siempre abiertos (a no ser que estén en un recinto ya cerrado o tengan horario, obvio xD), y generalmente siempre impecables y limpitos (¡y con papel higiénico!, esto ya es la bomba)…
Una auténtica pasada que aquí por estos lares es inviable por desgracia (¿baños públicos, abiertos, gratuitos, limpios y con papel higiénico en Madrid?, eso ya no existe xD)… Además, en muchos de ellos, tenemos wc futurista limpiaojetes inclusive… ¡lujazo! ;).
2. Los baños tradicionales de Japón.
El baño en Japón es cultura, es patrimonio, es culto, es rito… es algo importantísimo para los japoneses. No estamos hablando de algo tan «simple y lógico» como el hecho de lavarse y limpiarse, es mucho más que todo ello, presentando normas, pasos e incluso ritos a seguir y cumplir. Da igual que hablemos, por ejemplo; de un ofuro (en casa, con bañera profunda), de un sento (baños públicos comunales), de un onsen (baños termales con agua volcánica) de un rotenburo (generalmente parte del onsen, es exterior) o de un ashiyu (pequeñas piscinas de agua termal donde sentarnos y meter los pies)…
Todos y cada uno con sus instrucciones, normas y etiquetas… aunque, simplificando enormemente y de forma general, encontramos dos zonas bien diferenciadas; la de ducha para limpiarnos, y la de baño para relajarnos, y es que, primero uno tiene que lavarse y ducharse antes de entrar para así estar bien limpitos, se lleva una pequeña toallita (generalmente utilizada para tarpase un poquito si uno es pudoroso o/y ponérsela en la cabeza con agua más fresquita para «compensar»), hombres y mujeres por separado (también los hay mixtos, aunque son los menos), cuidado con los tatuajes (lo normal es que no te permitan el acceso, aunque se están relajando un poquito y hay lugares donde si eres extranjero te permiten el acceso o/y si es un tatuaje pequeñito te lo puedes cubrir), y vamos desnuditos (aunque para zonas comunes, fuera de los baños, solemos tener yukata ;)). Y cada onsen y demás, es un mundo… los hay de todo tipo y con todo tipo de facilidades…
Disfrutar de los baños tradicionales de Japón es un auténtico placer y una auténtica delicia para todos los que, como nosotros, no estamos acostumbrados ni tenemos la costumbre cultural de los mismos más allá del contexto «limpieza» como digo, obviando los siguientes pasos: relax, disfrute, introspección, zen… Los baños tradicionales son una experiencia cultural que todos debemos probar y disfrutar en Japón (¡obligatorio!), y que todos echamos de menos por aquí una vez hemos vuelto… Y no, aunque en Europa y en España podemos encontrar lugares similares (y tenemos muuuchas opciones por aquí), un baño árabe o un spa, por ejemplo y por mucho que me encanten igualmente, son «otra cosa»…
Indicar no obstante que en España hay diversas zonas (como Orense por ejemplo) donde es posible visitar y disfrutar de lo más parecido a un ofuro, sento, onsen o rotenburo japoneses. En fin, sí, echo de menos los baños termales japoneses y poder disfrutarlos en el día a día…
3. Las bandejas para el dinero de Japón.
Sí, no deja de ser un aspecto «menor», incluso una «tontería», pero se agradece por la comodidad… Y es que (no en todos lados obviamente, pero sí de forma genérica en konbinis, supermercados, centros comerciales y tiendas) es habitual que cuando pagues algo tengas una pequeña bandejita donde poder ir depositando el dinero… Algo especialmente útil cuando tienes muuuchas monedas y no controlas la misma, y tienes que ir escudriñando tu bolsillo y analizando lo que tienes en la mano para poder pagar…
Más incómodo, tardas más tiempo, se te caen, la persona que te atiende mientras esperando… Pues no mira, con tranquilidad, vas dejando el dinero en la bandejita, lo recogen, y la vuelta pues igual, en la bandejita junto con tu ticket y lo recoges tú… Y no, como aquí, que te dan monedas, billetes y ticket todo junto en la mano, que tienes que hacer malabares para que no se te caiga y poder guardarlo :S. Pues sí, las bandejitas y su comodidad se echan de menos…
4. Poder beber alcohol en las calles de Japón.
Hasta donde yo sé, y hablando en general, en Japón no hay restricciones horarias para vender alcohol ni está prohibido consumirlo en la calle, de hecho tampoco hay restricciones respecto a lugares donde puedes consumirlo, siendo posible hacerlo, no ya en la calle, sino en cualquier parque o en el transporte público por ejemplo… E, igualmente, es uno de los países del mundo que muestra mayor tolerancia al consumo de alcohol.
No obstante, la edad mínima para poder consumir alcohol son 20 años, y esto sí que lo controlan (siempre cuando y no sean vending machines claro, que cualquiera puede comprar xD, por eso cada vez hay menos vending de cerveza en las calles…), por lo que solicitar una identificación es algo habitual… A nosotros como extranjeros; turistas y viajeros varios, raro es que nos la vayan a pedir («aparentes» ser mayor edad allí o no), pero sí es cierto que en la gran mayoría de konbinis, al comprar alcohol y pagar, debes marcar en una pantalla táctil (es fácil de entender, la primera vez te chocará, luego ya estás acostumbrado) que eres mayor edad y puedes consumir alcohol.
¿Y por qué lo echas de menos?, pues obviamente porque en España, en Madrid, tenemos la «ley del alcohol», la cual entró en vigor en 2014 y, dentro de su «complejidad», nos prohibe beber alcohol en la calle… ¿Una putada?, sí, para los que somos cerveceros lo es… pero no deja de ser totalmente lógico y normal… Me explico… Cierto es que los japos tienen un «grave problema con el alcohol», especialmente en el «entorno salaryman» y, más allá de los pedetes importantes que se pillan siendo habitual encontrarse a borrachuzos japos tirados por las calles y en las estaciones, tampoco olvidemos que no metabolizan correctamente el alcohol… aguantan muy poquito vamos (y tengo muchas anécdotas al respecto xD).
En España (más allá de nuestra vida social, vida en la calle, ser el país con más densidad bares del mundo, o duplicar el consumido medio del alcohol en el mundo), somos animalitos de bellota que no sabemos comportarnos, y (botellones aparte), la peña va bebiendo alcohol por la calle… la lata (o lo que sea) la tira al suelo, no controlan y son un «peligro público» (no te tiras a dormir en cualquier lado, tampoco lo puedes hacer por seguridad obviamente, sino que les da por destruir el entorno y buscar movidas), etc, etc, etc…
La lista sería inabarcable… Por ello, es obvio y lógico (por desgracia para la «gente normal»), que se prohiba beber en la calle por aquí, ya que no sabemos comportarnos como personas medianamente civilizadas… Yo, tengo un comportamiento y educación medianamente correcto, o lo intento, y voy con mi lata de cerveza tranquilamente sin molestar, la tiro en una papelera al terminar, y no me pillo el pedo mientras me pongo a destruir… En fin, aquí no puedo beber en la calle, pero en Japón sí, y tan a gusto.
5. La mezcla de tradición y modernidad de Japón.
Japón es, sin duda, el país del mundo donde es más patente la mezcla entre tradición y modernidad. Japón es un país de mezcla y contrastes, de exageración y extremos inabarcables e infinitos en todo ámbito y aspecto… y es algo que a nosotros, como europeos y como españoles, nos sorprende sobremanera… más aún cuando por estos lares muchas tradiciones culturales e históricas son perseguidas y eliminadas en base al radical sectarismo totalitario que tan bien conocemos por aquí…
Y aquí, igualmente, tenemos tradición, tenemos modernidad… y mezclamos la tradición y la modernidad, es algo inevitable y lógico en todo lugar con una amplia historia a sus espaldas. Pero, y más allá de las evidentes diferencias culturales y que en Japón vayamos con la boca abierta flipando por absolutamente todo, en el país nipón la mezcla es mucho más evidente, conviviendo tradición y modernidad de forma perfecta e imperceptible para los ojos de un japonés, y para los nuestros… aunque flipemos xD.
Japón y el japonés no persigue ni elimina sus tradiciones culturales e históricas, ya que es una cultura milenaria que se preocupa por mantener, preservar y cuidar sus tradiciones, donde se vive el presente y todo fluye de forma suave e integrada. Y esa mezcla es única en el mundo, conviviendo perfectamente en la sociedad… Sin entrar en aspectos sociológicos y culturales más profundos que influyen sobremanera en el aspecto presente, me remito a simples y habituales hechos como estar caminando entre orgullosos rascacielos y encontrarte con un humilde templo… estar sentado en el metro teniendo a un lado a un chico de rollo cyberpunk y al otro lado una señora en kimono… al estar utilizando la más absoluta tecnología futurista mientras un japonés te explica qué es un kami o yokai…
Simples hechos que sorprenden por cómo Japón y el japonés los tiene asumidos como algo normal y evidente, pero que a nosotros nos choca… y no es que eche de menos en sí la mezcla de tradición y modernidad de Japón (es «absurdo»), sino, reitero, el hecho de cómo lo tienen interiorizado, siendo algo lógico y normal, y se muestran orgullosos de ello mientras protegen y potencian sus tradiciones y la mezcla de las mismas con la modernidad de la que igualmente hace gala Japón.