Dónde dormir en Kii-Katsuura (Japón). Review del alojamiento en Kii-Katsuura (Japón) – Hotel Sunrise Katsuura. Utilizado en mi viaje a Francia – China – Japón ’18 (23 días).
Alojamiento en Kii-Katsuura (Japón). HOTEL SUNRISE KATSUURA. Del 26.06.18 al 27.06.18. Total 2 días / 1 noche. Precio total 35,52€. Precio por noche y persona 35,52€ (habitación privada, baño privado).
En el viaje a Francia – China – Japón ’18 (23 días); mi cuarto viaje al País del Sol Naciente, tocaba por fin visitar el Camino de Kumano o Kumano Kodo como parte de los Sitios sagrados y rutas de peregrinación de los Montes Kii, siendo Patrimonio de la Humanidad y lugares sagrados para el budismo y el sintoísmo desde el 2004, incluyendo Kumano Sanzan y Koyasan (en la prefectura de Wakayama), y Yoshino y Omine (en la prefectura de Nara). El espectacular Koyasán o Monte Koya, ya lo había visitado durante el viaje a Japón – China (Hong Kong & Macao) ’08 (23 días), (¡y nos alojamos en un espectacular shukubo o templo budista!), mientras que el precioso Yoshino lo pude visitar durante el viaje a Francia – Mónaco ’18 (3 días).
En la presente ocasión, y por fin como indicaba tras realizar 4 viajes a Japón, tocaba recorrer Kumano Kodo, visitando, entre otros lugares; Nachi-taisha, Hayatama-taisha, Hongu-taisha, Yunomine Onsen, Kii-Tanabe o Nachikatsuura, al igual que realizar un par de rutitas senderistas y de peregrinaje… Y es que estamos hablando de un entorno cuyos lugares y distintas rutas (siendo 7 las rutas principales), son sagradas, con una historia que nos remonta a más de 1.200 años, ¡y con más de 3.000 santuarios y templos! :O.
Kumano es uno de los más importantes centros espirituales de Japón, y solo hay dos caminos de peregrinación que son Patrimonio de la Humanidad en el mundo; uno es el Camino de Santiago, el otro es el Camino de Kumano (estando hermanados), por lo que es evidente la importancia del lugar que iba a visitar, por fin ;).
La peregrinación en Kumano no es «simple turismo»; estamos hablando de una experiencia religiosa, filosófica o/y espiritual… una experiencia de historia, patrimonio y cultura… una experiencia de naturaleza en estado puro y de respeto y admiración por nuestro entorno… una experiencia tanto física como mental que bien merece la pena vivirla… una experiencia de descanso, de peregrinaje, de instrospección… una experiencia visual que es un regalo para los ojos y que se nos quedará en la retina para siempre…
Sí; vivirla, disfrutarla y experimentarla, sea 1 día realizando algún tour organizado en Kumano Kodo, sean 3 poquitos días como hice yo… Al Camino de Kumano le puedes dedicar todo el tiempo que quieras, según tu disponibilidad y cómo te lo plantees (al igual que el Camino de Santiago), yo te recomiendo, como mínimo: 5-7 días…
Por desgracia no hay tiempo para todo, y aunque me hubiera encantado dedicar bastantes más días a un Kumano Kodo que parecía un eterno pendiente, no podía cuadrarlo de otra forma en el presente viaje a Japón… Así que finalmente decidí dedicar 3 días, menos es nada… Y aunque sabe a poco y se quedan cortitos (tocará volver más tiempo, sin duda), fueron aprovechados al máximo visitando y realizando todo lo previsto.
Eso sí, me costó muchísimo organizar la ruta debido al poquito tiempo disponible, la ingente oferta en todos los sentidos y la complejidad y dificultad del transporte en la zona… Si disponemos de coche de alquiler para movernos por la zona, perfecto... si no, tocará moverse en autobuses locales (que, eso sí, llegan a todos lados y cubren todo el territorio), moverse en tren (poquito, recomendable como es obvio tener el Japan Rail Pass)… y moverse a pie, pateando por el entorno mediante las distintas rutas de peregrinaje ;).
Opciones mil y planificaciones mil, pero yo te recomiendo encarecidamente que, depende el tiempo que inviertas (poquito como fue mi caso), el transporte utilizado y, principalmente, el orden de la ruta que realices en el Camino de Kumano… escojas una ciudad como base de operaciones para moverte por la zona. En mi caso, y debido a lo indicado y el orden de mi ruta, elegí Kii-Katsuura para alojarme, no como base (ya que apenas iba a estar una noche), pero sí como la parada ideal donde establecerme en mi ruta, siendo una de las localizaciones «perfectas» y más utilizadas por turistas y viajeros en su ruta por Kumano Kodo… Si vas a invertir más tiempo en la zona, no necesitarás campamento base normalmente, ya que irás de rutilla y cada día acabarás en un sitio distinto…
Kii-Katsuura es un pueblo pesquero de la Península de Kii, el cual destaca principalmente por su gran oferta y variedad en lo que respecta a onsen y balnearios, al igual que en opciones gastronómicas; con bares, restaurantes e izakayas donde degustar su deliciosa gastronomía (especialmente atún y wagyu… probé las dos especialidades, y simplemente: delicioso y espectacular :O)… Siendo un pueblo tranquilo y silencioso, donde a primera hora de la tarde y en cuanto cae el sol, no queda un alma por la calle y nos encontramos absolutamente todo cerrado… ¡Ah!, y contad que apenas hay konbinis 24h, de hecho yo solo encontré uno…
Más allá de la localización y la gastronomía, cierto es que no muchas opciones turísticas tenemos en Kii-Katsuura; usar los baños termales para pies gratuitos (hay uno justo a la salida de la estación), asistir a la subasta de atún, o coger algún barquito para hacer un crucero de avistamiento de ballenas y delfines…
De hecho, las primeras opciones que valoraba eran otros alojamientos, varios hostels; por precio, y por localización (en los alrededores de la Estación de Kii-Katsuura). Pero he ahí que encontré a última hora una ofertilla en el presente hotel… No me terminaba de convencer por la localización, pero los servicios y características que me ofrecía al precio en cuestión (y que veremos a continuación), merecían la pena… ¡Pasemos a la review del Hotel Sunrise Katsuura! ;).
Respecto a la localización, nos encontramos a 10min andando de la Estación de Kii-Katsuura (aunque cierto es, no sé por qué, que el paseo se me hacía bastante larguillo y pesado :S). El hotel es muy fácil de localizar no obstante, mapa en mano no tiene pérdida y la mitad del camino desde la estación va casi paralelo a las líneas de tren (y luego dirección a la costa).
La zona en la que nos encontramos y alrededor de nuestro alojamiento es tranquila y silenciosa, bien por ello, pero por lo que yo pude ver (obviamente no me recorrí todas las calles adyacentes xD), es una zona completamente residencial donde no tenemos nada de nada… Ni tiendas ni opciones de restauración, ni convenience stores… De hecho y como indicaba, el único konbini que encontré en Kii-Katsuura se encuentra de camino entre la estación y el hotel… A unos 5min de ambos, y menos mal, ya que lo normal es que pasemos siempre por aquí (no tiene pérdida), y el konbini es más bien un pequeño supermercado (con un importante parking) donde encontramos absolutamente de todo… Aquí compré yo en varias ocasiones ;).
Situado a pie de calle en una avenida (lo normal es que nos lo encontremos a nuestra derecha), es fácilmente visible desde el exterior, desde la acera, gracias a su gran cartel blanco y las letras en rojo «SRK». Frente a nosotros tenemos el hotel propiamente dicho; un mamotreto blanco de 4 plantas en piedra y cristal de «estilo occidental» que, de primeras, nos puede provocar cierto «rechazo visual». A nuestra izquierda se encuentra el parking del hotel (perfecto si nos estamos moviendo en coche de alquiler, además es gratis), y a nuestra derecha un pequeño jardincito.
El acceso principal al mismo se encuentra en un amplio pasillo bajo un tejadillo oscuro (donde, ahora sí, encontramos el nombre del alojamiento en alfabeto occidental: Hotel Sunrise Katsuura). Entramos a la luminosa recepción en suelo de mármol blanco, y frente a nosotros se encuentra el pequeñito mostrador principal, a su izquierda un cajero automático, y a su derecha se encuentra un espacio para alquilar bicicletas, y se expande un espectacular salón en suelo de madera y con muchísima luz natural debido a los grandes ventanales existentes.
Bien, a pesar de todo, la primera impresión es muy buena, todo parece bastante nuevo… Como de hecho es, ya que el hotel fue restaurado en 2017 :).
El espacio está dividido en dos zonas; la primera consiste en una serie de mesas y cómodas sillas a modo de zona de espera y lectura… mientras el segundo, consiste en el restaurante del hotel (Restaurante Aoumi), con un par de decenas de mesas y sus correspondientes sillas, espacio igual de luminoso.
Al apenas alojarme una noche, llegar relativamente tarde, salir relativamente pronto, y adquirir comida en el ya citado konbini, no pude probar su cocina… Pero cierto es que había leído buenas opiniones y la carta tenía muy buena pinta… Con desayuno (a la carta y buffet), y comidas y cenas a la carta, la misma es de estilo japonés, predominando el producto local típico y de calidad, como el pescado y el ya citado wagyu… La carta y los menús tenían una pinta espectacular y con precios para todos los bolsillos, lástima no haber tenido tiempo…
Bien, y al otro lado de la imponente cristalera, nos encontramos con una ingente terraza exterior con mesas y banquetas comunales (en temporada se hacen barbacoas, también podemos comer aquí), y con igualmente espectaculares vistas a la Bahía de Nachi (posterior al jardín que tenemos frente a nosotros)… Y es que no olvidemos que el Hotel Sunrise Katsuura se encuentra frente al mar, aunque no tenemos playa 🙁 (sí hay playa en Kii-Katsuura).
Bien, y ahora pasamos a la habitación, uno de los más importantes valores añadidos que, más allá del precio y junto con el onsen, hizo que me decidiera por reservar habitación en el Sunrise Hotel Katsuura...
Estamos en Japón colega, si puedes, al menos alguna noche tendrás que alojarte en una ryokan, shukubo, etc… o, al menos, dormir en una habitación tradicional japonesa con tatami y futón, ¡qué menos! El hotel dispone de habitaciones de estilo occidental y tradicional japonés (habitualmente más caras), de distintas características y situadas en las plantas 3 y 4… En mi caso reservé una habitación estándar de estilo japonés con vistas y 13m2.
A la habitación se accede con tarjeta magnética, y nada más abrir la puerta… ¡Mooola, qué chula! Qué le voy a hacer, me encantan las habitaciones tradicionales japonesas, en Japón me he podido alojar con estas características en, por ejemplo: Kochi, Takayama, Koyasan, Kioto o Tokio… Y, si puedo, siempre intento e intentaré alojarme alguna noche en una habitación tradicional… Como siempre digo (y valga la coña con «ejemplos» en Takayama o Koyasan), puedes tomarte tus cervecitas o tu sake, e ir rodando por el tatami hasta el futón xDDD.
En serio… Me encantó la habitación… Entramos al recibidor, a nuestra derecha (en dos espacios abiertos separados por un pequeño tabique), tenemos un zapatero con varias repisas (donde dejaremos nuestro calzado y nos pondremos uno habilitado para poder andar sobre el tatami… bueno, ya sabéis que en Japón es indispensable quitarse el calzado al acceder a una vivienda, habitación en este caso), y un lavabo, con amenities varios y dispensador de papel.
A nuestra izquierda, el wc, ahí solito el pobre (con sus propias zapatillas obviamente, solo de uso en el baño)… Algo antiguo, pero eso sí; futurista limpiaojetes y calefactado… Sí, hacer popó (cagar, vamos xD) en un trono galáctico, siempre es un placer ;).
Vale, sí, tenemos un lavabo a un lado, y un inodoro a otro (tiene puerta corredera)… Pero esto es Japón, las cosas son así… Y repito; lavabo e inodoro, no hay ducha en las habitaciones tradicionales japonesas del Hotel Sunrise Katsuura… Para las duchas tenemos los baños compartidos (con duchas suficientes), o el onsen, del que luego hablaremos (ambos en la segunda planta).
La habitación se extiende ante nosotros (separada del anterior espacio por una puerta corredera, perfecto para aislar ruido, y distribución habitual de este tipo de habitaciones), sobrada para 1 persona, ideal para 2, pero donde pueden estar 3 personas sin mucho problema… A nuestra izquierda hay un armario donde se guardan los futones y demás…
El mío, estaba ya colocado sobre el tatami en la parte izquierda, pegado a la pared (muy cómodo, dormí más que bien), en el centro de la habitación tenemos una mesa de madera marrón bastante grande (demasiado grande para la habitación en la que nos encontramos), con una pequeña silla japonesa o de estilo japonés para suelo/tatami, y a la derecha y pegado a la pared (y no sobre el tatami), tenemos otro armario para ropa y demás, y un mueble de madera negro donde se ubica la televisión, teléfono, radio despertador, dispensandor de pañuelos, calentador de agua y caja fuerte…
Impecable, minimalista, perfecta, me encanta :D.
Pero hay más… Bien, la habitación tiene enchufes suficientes (en ocasiones es un problema), sobre la mesa central encontramos una bandejita con cuencos y juego de té (muy chulos, me lo hubiera llevado jurjur), y al abrir el armario para la ropa, en la repisa superior, encontramos lo siguiente (todo colocadito): un quitapelos o quitapelusa (realmente vintage), secador de pelo, más amenities (peine, cepillo de dientes, bastoncillos, etc), dos toallas (una grande y una pequeña de mano o cara) y, obviamente (no podía faltar en una habitación así); nuestro yukata japonés… Yukata al que, obviamente, di uso (tanto en la habitación como para andar por el hotel e ir al onsen evidentemente).
Por último, reseñar la pequeña y acogedora terracita de la habitación… Al fondo de la misma y separada del resto de la habitación por puertas correderas de papel de arroz, nos encontramos un estrecho espacio rectangular con una pequeña mesita, dos pequeñas sillas y una (valga la redundancia) pequeña neverita… y con vistas muy chulas (bueeeno, estaba nublado y hacía mal día) de la Bahía de Nachi (y de la barrera de contención en primer plano xD).
Nada espectacular pero es de agradecer tener una terraza con vistas… E ideal para sentarse aquí tranquilamente con una cervecita mirando al infinito por la ventana… :D.
Y ahora llegamos al que es sin duda uno de los grandes atractivos y valores añadidos del Hotel Sunrise Katsuura y que, junto con el precio en sí y la habitación, hizo que me decidiera a reservarlo…
No concibo estar en Japón y no quedarme en algún alojamiento con baños (onsen, sento, rotenburo, ofuro o tal), y es que tener este tipo de servicio incluido en tu alojamiento es una auténtica gozada, una auténtica pasada y uno de los aspectos que más echamos de menos al volver de Japón… Poder darse un bañito relajante en alguno de estos baños cuando llegamos sudorosos y cansados al final del día, es una puta maravilla, y si lo habéis probado, estoy completamente seguro que estaréis de acuerdo conmigo ;).
Durante el presente viaje Francia – Mónaco ’18 (3 días) ya había tenido la oportunidad de quedarme en un hostel súper chulo en Kitakyushu que tenía baños (sento), ahora tocaba el segundo del viaje (onsen y rotenburo), y, evidentemente, iba a ser bien aprovechado :D… Más aún cuando nos encontramos en una zona y población que además es famosa y presume del número y calidad de sus onsen y baños termales.
Bien, los baños termales se encuentran situados en la segunda planta del complejo, y como es obvio están incluidos y todos los huéspedes podemos hacer uso del mismo… El acceso está indicado solo en japonés (deberemos guiarnos por los colores y el cartelito en la pared xD), con el símbolo del onsen y tras la pequeña cortina o noren habitual que marca la entrada a unos baños…
Además, debido a mis horarios habituales y llegar tarde (y entre que cenas y tal y cual), pues yo fui a los baños a última hora del día, bañándome y disfrutando del momento en casi completo silencio y soledad, perfecto para descansar, relajarse y hacer una pequeña introspección, solo coincidí con un padre y su hija (ambos japos), y otro chico (también japo), que llegó más tarde y apenas estuvo un ratillo. Por ello, y tras echar un vistazo previo, opté por dejar el móvil en la taquilla y no sacar fotos por respeto como es evidente al no estar solo (de ahí que no tenga fotillos de los baños termales, las cuales podéis ver aquí).
Abierto casi las 24h (solo cierran un ratillo para limpiar y demás), accedemos directamente al espacio donde nos podremos cambiar; muy luminoso, amplio, con varios taburetes donde poder sentarnos, baños y lavabos donde (posteriormente), acicalarnos y demás (incluye las amenities y servicios habituales: Crema, pañuelos, bastoncillos, secadores, etc), y varios espacios con cestitas donde dejar nuestra ropa y pertenencias… No, aquí no hay taquillas… Sin embargo, en el pasillo exterior del hotel previo acceso al onsen, encontramos taquillas donde poder dejar nuestros objetos de valor (sí, lo sé, no tiene mucho sentido).
Bien, una vez ya estamos en bolas, accedemos al onsen tras atravesar la puerta corredera… ¡Qué chulo!; un espacio en los habituales colores grises y de rollete minimalista… A nuestra derecha y en una sala aparte (y al aire libre y con vistas al jardín y la Bahía de Nachi), encontramos el rotenburo, diseñado con piedras. Y en el espacio frente a nosotros como tal, a la izquierda tenemos el «apartado» de limpieza, y a la derecha encontramos el onsen (también con diversa decoración con piedras también).
Primero accedemos al espacio de limpieza, con 7 lugares habilitados donde nos sentaremos en el habitual taburete y nos lavaremos con el cubo de agua o el mango de la ducha, y una vez bien ya limpitos (tenemos jabón corporal y facial, champú, crema, etc), podemos acceder al onsen… Primero nos limpiamos, luego nos relajamos, así es en Japón, y así es como debe ser ;).
Y a continuación nos metemos en el onsen interior (también con vistas)… Despacito como siempre y con tranquilidad, somos simples gaijines no acostumbrados a la temperatura del infierno. Sí, agua completamente hirviendo como es habitual xD, me costó un poquito aclimatarme, pero una vez dentro… ¡a relajarse y a disfrutar! :D.
Y del onsen interior, al rotenburo exterior (aquí sí estuve solo todo el ratito), y sí, con agua completamente hirviendo de nuevo, y de nuevo, a relajarse y a disfrutar xD.
Una pasada, de verdad… Siempre comento que en todo viaje a Japón, estas situaciones son casi impagables, siendo algunos de los mejores momentos del viaje… Cierras los ojos, te evades un poquito, realizas una pequeña y breve introspección (e incluso meditación)… Y como nuevo, a descansar y listo para el siguiente día de turismo y pateada a saco.
Seguimos… El Hotel Sunrise Katsuura nos ofrece servicio de alquiler de bicicletas como ya he indicado, al igual que servicio de lavandería con una sala habilitada con lavadoras/secadoras a monedas (el detergente está incluido), situado en la segunda planta…
Hay servicio de guardaequipaje y lockers para dejar nuestro equipaje en llegadas/salidas… Tenemos wifi gratuito en todo el alojamiento (rápido y sin cortes)… Hay salas de banquetes y reuniones… Tenemos maquinas expendedoras (perfecto para cogerse una cervecita de última hora, en la segunda planta)… Al igual que baños comunales y compartidos (también en la segunda planta), y con suficientes lavabos, inodoros y duchas… Y absolutamente todo el recinto está impecablemente limpio y en orden.
Respecto a la atención al cliente; correcta y mínima, sin más… Checkin y checkout, todo fue rápido y correcto, personal uniformado, y hablaban un mínimo de inglés para el trámite correspondiente.
No hubo ruido ni jaleo durante mi estancia, silencio y tranquilidad absoluta… Es algo muy subjetivo como es obvio (depende lo que te toque en el alojamiento, pero ciertamente bien en este sentido, ya sabéis que el ruido lo llevo muy mal y por ello yo viajo siempre con tapones para los oídos).
Debido a la localización del hotel en plena «zona Kumano» y que puede ser utilizado como base de operaciones en la zona, es posible que nos encontremos turistas y extranjeros, aunque debido a su relativa «lejanía» y sus precios habituales, no creo que sea la norma… De hecho yo no me crucé ni vi ningún occidental, todos japos, y muchos por trabajo (tenía toda la pinta).
En fin, finalizando la review, el Hotel Sunrise Katsuura es un alojamiento recomendable en Kii-Katsuura y que supuso una grata sorpresa (más aún al precio conseguido), y al que yo volvería. Presenta una correcta relación calidad/precio, limpio, con buenas instalaciones y un espectacular onsen y rotenburo y que, quizás, como punto no menos bueno, podríamos indicar la localización (pero nada que no arregle un paseíto xD)… En definitiva; una buena elección y un buen lugar en el que quedarse en Kii-Katsuura durante nuestra visita y recorrido por Kumano Kodo ;).
Información práctica y datos de interés, del Hotel Sunrise Katsuura en Kii-Katsuura.
Dónde está y cómo llegar: el Hotel Sunrise Katsuura Hotel se encuentra situado en 803-3 Tenma, Nachikatsuura, Higashimuro District, Wakayama Prefecture 649-5331, Japón.
Teléfono: +81735523030.
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