Visitar, qué ver y qué hacer, en Yunomine Onsen (Japón).
Increíble onsen Patrimonio de la Humanidad en pleno Camino Kumano (Kumano Kodo).
Camino Kumano o Kumano Kodo; Sitio Sagrado y Ruta de Peregrinación Patrimonio de la Humanidad. Historia, rutas, templos e información.
En el viaje a Francia – China – Japón ’18 (23 días); mi cuarto viaje al País del Sol Naciente (¡y los que queden!), tocaba por fin visitar el Camino de Kumano o Kumano Kodo como parte de los Sitios sagrados y rutas de peregrinación de los Montes Kii, siendo Patrimonio de la Humanidad y lugares sagrados para el budismo y el sintoísmo desde el 2004 (con casi 1.700 ha protegidas y respetadas), incluyendo Kumano Sanzan y Koyasan (en la prefectura de Wakayama), y Yoshino y Omine (en la prefectura de Nara). El espectacular Koyasán o Monte Koya (sede y centro más importante del budismo shingon en Japón), ya lo había visitado durante el viaje a Japón – China (Hong Kong & Macao) ’08 (23 días), (¡y nos alojamos en un espectacular shukubo o templo budista, con dieta vegetariana incluida!), mientras que el precioso Yoshino (un increíble entorno natural considerado el mejor lugar de Japón para asistir a la floración del cerezo) lo pude visitar durante el viaje a Francia – Mónaco ’18 (3 días)., (¡y comer en un restaurante local especializado en tofu!).
El Camino Kumano o Kumano Kodo es el «equivalente» a nuestro Camino de Santiago. De hecho, ambos caminos están hermanados, siendo igualmente ambos Patrimonio de la Humanidad y únicos dos caminos sagrados de este tipo y tales características en el mundo en ostentar tal título de la UNESCO, reconociendo el «Dual Pilgrim» con un sello y distintivo especial a aquellas personas que han completado ambos caminos. Kumano es uno de los más importantes centros espirituales de Japón, por lo que es evidente la importancia del lugar que iba a visitar, por fin 😉
No hablamos de «simple turismo» en Kumano, sino que hablamos de peregrinación; de algo mucho más grande y sobrecogedor. Estamos hablando de una experiencia religiosa, filosófica o/y espiritual… De una experiencia de historia, patrimonio y cultura… De una experiencia de naturaleza en estado puro y de respeto y admiración por nuestro entorno… De una experiencia tanto física como mental que bien merece la pena vivirla… De una experiencia de descanso, de meditación de instrospección… De una experiencia visual que es un regalo para los ojos y que se nos quedará en la retina para siempre… De la búsqueda de unas raíces espirituales, naturales y un estilo de vida tradicional, que se ha perdido en la vida moderna…
Kumano Kodo nos remonta a casi 1.500 años de historia, patrimonio, cultura y espiritualidad. Sin embargo, Kumano ha sido considerado lugar sagrado desde tiempos prehistóricos, y siempre asociado con la adoración, devoción y respeto por la naturaleza.
¡Ah!, y como curiosidad, reseñar que el símbolo de Kumano es el Yatagarasu o cuervo sagrado de tres patas con las alas extendidas (criatura mitológica japonesa enviada por los kami o/y el Emperador Jinmu Tenno, se cree que Yatagarasu evolucionó a partir de criaturas mitológicas similares en China o/y Corea), siendo símbolo también de la Asociación Japonesa de Fútbol JFA. Es un símbolo cuya presencia veréis de forma habitual en la zona ;).
Una historia que nos remonta al s. VI con la llegada del budismo, pasando por el Periodo Heian y el peregrinaje de emperadores, el Periodo Mappo y la búsqueda de la paz en un país sumido en la guerra y la destrucción, la lucha de la familia imperial y los aristócratas con guerras internas, la paz feudalista del Gobierno Tokugawa y los samuráis, la Restauración Meiji con el colapso del sistema feudal y evolución a Estado moderno, la separación del budismo y sintoísmo y control de la religión, la creación de leyes para preservar el peregrinaje a Kumano Kodo a principios del s. XX, la Segunda Guerra Mundial, y el crecimiento y aumento de peregrinos desde los años ’90 hasta nuestros días (llegando a ser el Camino Kumano Patrimonio de la Humanidad en 2004).
Por otra, parte, hay que reseñar, se dice pronto, que son más de 3000 santuarios y templos los que nos esperan en las distintas y múltiples rutas que nos ofrece Kumano Kodo (sin olvidar los Templos Oji, como templos y santuarios subsidiarios de diferentes deidades de Kumano que protegen y guían a los peregrinos, siendo importantes lugares religiosos de adoración y descanso), siendo 5 las rutas principales:
Ruta Nakahechi o Ruta Imperial (una de las rutas más populares y utilizada por la corte y familia imperial en los siglos X – XI), Ruta kohechi o Ruta Koyasan (una de las más complejas y complicadas, conectando el Monte Koya con Kumano), Ruta Omine Okugake o Ruta de Yoshino-Omine (camino muy complicado y habitual en las prácticas ascéticas de la tradición Shugendo, fue muy popular en el Periodo Edo), Ruta Oechi o Ruta de la Costa (una de las rutas menos habituales y con menor infraestructura e información, habitual entre los siglos X – XV), Ruta Iseji o Ruta de Ise (conecta Kumano con el Santuario de Ise; el más importante de Japón, siendo una ruta muy popular).
Yo en la presente ocasión, y por fin como indicaba tras realizar 4 viajes a Japón, tocaba recorrer, vivir, disfrutar y experimentar mínimamente Kumano Kodo durante 3 días. Al Camino de Kumano le puedes dedicar todo el tiempo que quieras obviamente, según tu disponibilidad, tiempo y planificación, yo te recomiendo como mínimo; 5-7 días en la zona. No obstante, con 3 días completos, puedes visitar los lugares principales (incluyendo Yunomine Onsen, Kii-Tanabe o Nachikatsuura).
Ello nos lleva, inexorablemente y ineludiblemente, a los tres grandes, importantes y obligatorios templos y santuarios a visitar en el Camino Kumano:
Hongu-taisha (siendo el templo principal de otros 3.000 en todo Japón situado en una colina rodeado de árboles históricos, sus restos fueron trasladado aquí en 1889 tras ser arrasado por una inundación en Oyunohara, cuya entrada está presidida por el torii más grande del mundo con casi 34m de altura y 172 toneladas)… Hayatama-taisha (santuario en la desembocadura del Río Kumano donde desembocan las aguas sagradas de los Montes Kii y con el árbol Nagi-no-Ki de 800 años)… Y Nachi-taisha (santuario en la Montaña de Nachi con la cascada más alta de Japón, el impresionante camino Daimon-zaka de 267 peldaños, y en un marco natural incomparable y lugar de entrenamiento ascético para los monjes Shugendo).
Y también, qué menos, a realizar alguna de los caminos o rutas de peregrinaje en Kumano Kodo. Yo en mi caso, realicé la ruta de Dainichi-goe entre Hongu-taisha y Yunomine Onsen. La ruta consta con un nivel de dificultad 2 (de 5), 3,5km de extensión y una duración de 1h15min. Yo la hice en menos de una hora… Sí, fui bastante rapidito pero la disfruté enormemente realizando también varias paraditas para descansar, sacar fotos y admirar y disfrutar el increíble y espectacular entorno natural en el que me encontraba… ¡una maravilla! Cierto es que es ruta cortita y es una ruta de senderismo/trekking factible para casi cualquier persona (con un mínimo de forma y experiencia), pero igualmente cierto es que es una ruta muy exigente que salva cierto desnivel y presenta terreno bastante irregular en según qué tramos.
De hecho yo, llegando al final y ya cerca de Yunomine Onsen, tuve un resbalón que me llevó mano a tierra, por suerte solo fue un golpe sin mayor complicación ni importancia (excepto mi honor xD)… Y con la humedad y calor existente, vas sudando la gota gorda en todo momento. Llegué a Yunomine Onsen reventadísimo… A tu ritmo y con cuidado, no deberías tener ningún inconveniente en terminarla. Eso sí, prepárate y lleva la equipación correspondiente como es lógico para este tipo de entornos y actividades.
Por desgracia no hay tiempo para todo, y aunque me hubiera encantado dedicar bastantes más días a un Kumano Kodo que parecía un eterno pendiente, no podía cuadrarlo de otra forma en el presente viaje a Japón… Así que finalmente decidí dedicar 3 díasal Camino Kumano, menos es nada… Y aunque sabe a poco y se quedan cortitos (tocará volver más tiempo, sin duda), fueron aprovechados al máximo visitando y realizando todo lo previsto.
Eso sí, me costó muchísimo organizar la ruta debido al poquito tiempo disponible, la extensa oferta en todos los sentidos y la complejidad y dificultad del transporte en la zona… Si disponemos de coche de alquiler para movernos por la zona, perfecto... si no, tocará moverse en autobuses locales (que, eso sí, llegan a todos lados y cubren todo el territorio), moverse en tren (recomendable como es obvio tener el Japan Rail Pass)… y moverse a pie, pateando por el entorno mediante las distintas rutas de peregrinaje ;).
En fin, como podéis ver, las opciones en el Camino Kumano son ingentes a todos lo niveles, por lo que es una visita que requiere un estudio y preparación muy exhaustiva, para la cual necesitarás toda la siguiente información:
Yunomine Onsen; un pequeño pero precioso alto en el peregrinaje.
Mi «peregrinación» y ruta por Kumano Kodo comenzó en Hongu-taisha, continuando con la exigente pero espectacular rutilla senderista/trekking Kumano Kodo Dainichi-goe, la cual me llevaría hasta Yunomine Onsen a media mañana, muy cansado y chorreando sudor como un animal debido al brutal calor y humedad existente… Necesitaba un onsen sí o sí para poder relajarme un poquito ;).
El nombre original de la población fue Yunomune («pecho de agua caliente»), que posteriormente cambió a Yunomine… Y ello debido al Templo Toko-ji (primer lugar donde brotó el agua de Yunomine) dedicado a Yakushi Nyorai (Buda de la Medicina), en cuyo interior se encuentra una estatua del propio Buda, creada por la acumulación de los sedimentos minerales del agua que mana de Yunomine Onsen, y de cuyo pecho brotaba el agua…
Así pues, los peregrinos llegaban a Yunomine Onsen para purificarse y rendir culto al Templo y el Buda de la Medicina… Una pequeñita y preciosa población (que no deja de ser un conglomerado de alojamientos y baños termales situados a ambos lados de la carretera principal y del arroyo en el canal, en el corazón de Kumano Kodo) cuyas aguas de origen volcánico y aguas termales están consideradas una de las mas antiguas de Japón (descubiertas y utilizadas desde hace 1800 años), estando en plena ruta de peregrinaje de Kumano Kodo (aquí comienzan, acaban y pasan importantes rutas), siendo parte integral de la misma y por donde pasaréis seguro, en vuestra ruta sagrada por el Camino Kumano. También, Yunomine Onsen es famoso por ser escenario de la obra de kabuki «Hangan Oguri y la Princesa Terute«.
Sus aguas (en concreto Tsuboyu Onsen como primer baño público y onsen en ser Patrimonio de la Humanidad y objetivo principal para visitar Yunomine Onsen), se dice, cambian de color siete veces en el transcurso de un día debido a sus componentes. Sus 90º de media, azufre, bicarbonato de sodio y sulfuro de hidrógeno, son más que eficaces y efectivas contra diferentes trastornos, problemas y enfermedades: digestivos, diabetes, reuma, piel, ansiedad, depresión, estrés, etc… Para mí piel delicadita, seguro que una temporadita aquí me venía de perlas ;).
En fin, nada más llegar a Yunomine Onsen, y debido al sendero por donde entraba desde la ruta Kumano Kodo Dainichi-goe, pasé al lado del Tsuboyu (dejándolo a mi izquierda), tras atravesar el pequeño puente de piedra sobre el canal de aguas termales de Yunomine Onsen, y que se encuentra paralelo a la carretera principal.
Me encontraba en la pequeña carretera principal de doble sentido que atraviesa Yunomine Onsen. A mi derecha, en dirección Hongu-taisha, había varios alojamientos… Al sur, dirección Tanabe, se encontraban más alojamientos, la tienda de souvenirs y donde podemos comprar productos para cocinar posteriormente en el pozo caliente, el Templo Toko-ji… Y los baños públicos, restaurante y taquilla donde comprar los tickets del Tsuboyu Onsen (frente a ellos, apenas unos pasos más abajo en la carretera, se encuentra la parada de autobús de Yunomine Onsen).
Si seguimos andando, en la entrada la pequeña población (si venimos de Tanabe), tenemos a nuestra izquierda, pegado a la carretera, un parking público gratuito. ¡Ah!, y hay varios baños públicos repartidos por todo Yunomine Onsen.
A pesar de estar situados en pleno verano y temporada alta, en uno de los lugares más relevantes y de casi «paso obligatorio» en Kumano Kodo, no encontré mucha gente por aquí durante mi breve estancia en Yunomine Onsen, más que un par de parejas occidentales (a unos los superé anteriormente en la ruta senderista antes de llegar a la población, otros, otra pareja, estaban en el onsen en el turno anterior al mío), y algún turista japo con el que estuve intercambiando unas palabras mientras cocíamos huevos xD. Ah, y un grupo importante de chinos (pegando gritos, como no podía ser de otra forma), que llegaron poco antes de que yo cogiera el bus…
En fin, en primer lugar di una vueltecita para obtener un vistazo rápido del lugar donde me encontraba y situar los diferentes lugares reseñados a continuación, para dirigirme de forma inmediata a adquirir los tickets del onsen, principal objetivo de mi visita a Yunomine Onsen. Tras ello, me dirigí al Tsuboyu Onsen, hice un poquito de tiempo en los alrededores hasta que llegó mi turno… ¡y a relajarse!
Yunomine Onsen es ciertamente una pequeña población encantadora; limpia, impecable, verde, de arquitectura tradicional, silenciosa… Con un halo místico por lo que simboliza y el lugar donde se encuentra en plena ruta de peregrinaje del Camino Kumano, a lo que sumamos (y directamente de forma intrínseca) el aspecto de salud, relax, purificador y naturaleza. Si yo hubiera tenido más tiempo en Kumano, creo que probablemente me habría alojado aquí una noche, la cual habría sido aprovechada para descansar, relajarme, meditar… y purificarme ;).
V-shop souvenir.
Sin ser una convenience store propiamente dicha, V-shop es la tienda que visitarás seguro en Yunomine Onsen. Sin pérdida alguna y situada en la carretera principal (y única) que atraviesa la pequeña población, está situada a mitad de camino entre Tsuboyu Onsen y la máquina expendedora y ventanilla de tickets, casi frente a la parada de bus de Yunomine Onsen (aquí te bajarás o/y subirás), y frente al pozo de madera de agua caliente de Yunomine Onsen.
En la pequeña tienda (atendida por una chica joven súper maja), podemos comprar algunos recuerdos, tenemos picoteo (poquito, pero ideal para tomar algo ligero y comprar agua o/y alguna cervecita, como hice yo xD), y, lo más importante; adquirir los huevos y las verduras que luego vamos a poder cocinar en el citado pozo.
Tanto verduras (había mucha batata) como huevos, vienen ya preparados en una pequeña red resistente a las temperaturas, con distintas unidades según tus necesidades, e indicado el tiempo de cocción necesario según producto y cantidad.
Yo pillé una cestita con tres huevos (las verduras tardan más), y así cocinarlas tranquilamente con los paisanos tras mi relajante bañito en el Tsuboyu Onsen 😉
Pozo Caliente Yuzutsu.
Casi frente a la tienda y a la parada de autobús de Yunomine Onsen, y junto a la orilla del pequeño arroyo en el canal bajando unas escaleras (a mitad de camino de Tsuboyu Onsen y la máquina expendedora y ventanilla de tickets), encontramos el Pozo Caliente Yuzutsu, el cual está rodeado y protegido por un marco de madera y una malla metálica.
El agua del pozo emana a casi 90º de temperatura, que se dice pronto, solo con acercarte ya notas el importante calor que desprende (y cierto olor a azufre)… El pozo está preparado y acondicionado para colgar las citadas redes con huevos o verduras que habrás comprado anteriormente, y cocerlas al calor del mismo (tardan su ratito, así que puedes aprovechar, como hice yo, para dar una vueltecita por la zona…).
Como es lógico, es habitual encontrarse aquí con todo tipo de turistas y viajeros, locales y extranjeros, todos con su red de huevos o verduras… Como yo, evidentemente ;). De hecho y como indicaba, estuve charlando amablemente con varios simpáticos paisanos, tanto al llegar y colocar mi red, como al volver a por ella, sacarlos, pelarlos y comerlos (no sin antes refrescarlos con agua fría de un grifo cercano, estaban hirviendo… pero perfectos, en su punto), los cuales me miraban curiosos y sonrientes, cuando no intentando hablar un mínimo inglés con diversas preguntas, a las que yo, amablemente, respondía :D.
No podía estar en Yunomine Onsen y no ser parte de la «tradición» xD. Además, tenía algo de tiempo hasta coger el bus que me llevaría a la estación de JR de Nachi, y había bastante hambre ciertamente tras la importante palicilla que me había dado en la ruta de trekking/senderismo que había realizado por la mañana desde Hongu-taisha hasta Yunomine Onsen, y disfrutar del espectacular Tsuboyu Onsen.
Templo Toko-ji.
El Templo Toko-ji se encuentra situado justo al lado de los Baños Públicos de Yunomine, y lugar donde podemos adquirir el ticket para Tsuboyu Onsen. El pequeño pero curioso y más que importante templo de la secta budista Tendai, está dedicado a Yakushi Nyorai; el Buda de la Medicina. En su interior, encontramos una estatua de unos 3m de altura del propio Yakushi Nyorai, realizada con la acumulación de los propios depósitos y sedimentos minerales de las aguas termales de Yunomine Onsen :O.
La leyenda cuenta que hace 1800 años, el Sacerdote Ragyo descubrió unas aguas termales que brotaban en este lugar, de un agujero situado en una estatua del Buda Sanador; Bhaisajyaguru, que aquí se encontraba (cuyo Festival de los Ocho Días en su honor se celebra el 8 de Enero). Y justo aquí, es donde se encuentra el Templo Toko-ji actual, lugar de la primera agua termal existente en Yunomine Onsen, y cuya agua brotó creando la citada estatua… y, a su vez, el agua del manantial sagrado brotaba del corazón de Yakushi Nyorai, trayendo, según se indicaba, la prosperidad al pueblo.
De ahí que el nombre original de la población fuera Yunomune («pecho de agua caliente»), que posteriormente cambió a Yunomine… Y los peregrinos llegaban a Yunomine Onsen para purificarse con sus aguas termales y aprovechar sus cualidades y propiedades curativas (tanto a nivel físico como espiritual), y visitar y rendir culto al Templo Toko-ji y a Yakushi Nyorai.
También, en el exterior del templo se encuentra un monumento de piedra erigido en homenaje al Monje Genpo, el cual nació y creció en Yunomine Onsen.
Casa de Té.
Igualmente, podemos destacar en Yunomine Onsen la Casa de Té, la cual se encuentra situada justo al lado del Templo Toko-ji, y que puede suponer una agradable parada de descanso en tu rutilla y tu paso por Yunomine Onsen, donde poder disfrutar de pequeñas delicias como udon, soba, oniguiri, mehari, zenzai o anmitsu… Yo, por tiempo y pasta, no me detuve en la misma…
Restaurante.
Frente a la máquina expendedora de los tickets donde comprar el mismo para el Tsuboyu Onsen, y el baño medicinal kusuri y el baño público sento, se encuentra el principal (y único realmente) restaurante y tienda (hay otras dos) de Yunomine Onsen, abierto de 11:00 – 21:30.
Cuando yo llegué, todavía se encontraba cerrado, no así la ventanilla existente aquí de información, atendida por un chico majete con el que hablé tras comprar el ticket para el Tsuboyu Onsen. Posteriormente volví por aquí, pero ya por tiempo no entré al mismo… Puede ser una buena opción para picar algo sentados tranquilamente si tenéis tiempo suficiente en Yunomine Onsen.
Baño medicinal kusuri y baño público sento.
Frente a la máquina expendedora para adquirir los tickets, y la ventanilla de información de la tienda y restaurante, se encuentra el baño medicinal (390 yenes) y el baño público (250 yenes). Ambos abren de 06:00 – 22:00 y con el ticket del Tsuboyu Onsen, tenemos la entrada para ambos. No obstante, es posible acceder a cada uno de ellos de forma independiente pagando la tarifa correspondiente.
A mí, por tiempo, me fui imposible visitarlos, pero sí accedí al sento público para asearme un poquito y utilizar los baños tras disfrutar del Tsuboyu Onsen.
¿Cómo llegar a Yunomine Onsen?
Yunomine Onsen es una habitual parada en toda ruta por el Camino Kumano tal y como indicaba. Sea en bus, en coche privado o a pie en ruta, es probable que pases por aquí, como fue mi caso… Llegué a pie tras un palizón importante desde Hongu-taisha realizando la ruta senderista y de peregrinaje Kumano Kodo Dainichi-goe, y me fui en bus hasta Nachi.
Debido a la gran expansión de la Península de Kii por donde se encuentran distribuidos los diferentes santuarios, lo más normal es utilizar el tren y llegar desde las ciudades de Kioto u Osaka hasta la zona de Wakayama para realizar el Camino Kumano. No es fácil moverse por Kumano Kodo en transporte publico en según qué zonas, por lo que es necesario planificar nuestra visita al milímetro, ya que dependemos de múltiples horarios de autobuses, y trenes diversos… y no todos están operativos durante todo el año. Igualmente, es clave en nuestra planificación de ruta, establecer la o las diferentes bases de operaciones, es decir; dónde nos vamos a alojar y desde dónde nos vamos a mover (en mi caso fue desde Kii-Tanabe y Kii-Katsuura).
Te moverás principalmente a/desde las estaciones de Japan Rail de Kii-Tanabe, Shingu y Nachi o Kii-Katsuura, y autobús desde aquí en unas u otras líneas y direcciones, hay muchas empresas dando servicio, con múltiples paradas en todas sus rutas que, en ocasiones, están entrelazadas. Teniendo claro los mapas y las diferentes líneas, no es tan complicado como ciertamente parece de inicio ;).
Para moverse por la península de Kii y Kumano Kodo en general, al igual que visitar Yunomine Onsen desde los distintos puntos de partida y rutas, aquí tienes toda la información que necesitas:
- Horario de autobuses de Tanabe y Shingu.
- Horario de todas las rutas de autobuses locales.
- Calendario para los autobuses de temporada.
- Mapa de rutas de los autobuses.
- Precio de las distintas rutas en autobús.
- Localización de las paradas de autobús en Kii-Tanabe, Shingu y Nachi.
- Autobuses de Koyasan.
- Autobuses de larga distancia a Kumano Kodo.
- Mapa de transporte de Kumano Kodo.
- Cómo viajar en los autobuses.
Tsuboyu Onsen; una experiencia única y especial. El baño en Japón; cultura y patrimonio.
El baño en Japón es cultura y patrimonio… siendo un aspecto más que importante para los japoneses en su vida diaria; es un acto social que nos acerca a la cultura japonesa y que, sin duda, todo viajero y turista en Japón, ha de ser partícipe. No estamos hablando de algo tan «simple y lógico» como el hecho de lavarse y limpiarse o su aspecto relativo a sus efectos medicinales y terapéuticos o simplemente relajantes… es mucho más que todo ello, presentando normas, pasos e incluso ritos a seguir y cumplir.
Da igual que hablemos, por ejemplo; de un ofuro (en casa, con bañera profunda), de un sento (baños públicos comunales), de un onsen (baños termales con agua volcánica) de un rotenburo (generalmente parte del onsen, es exterior) o de un ashiyu (pequeñas piscinas de agua termal donde sentarnos y meter los pies)… Todos y cada uno de ellos merecen ser tratados de forma extensa, y ser probados por nosotros de forma extensa, créeme que es una experiencia que debes probar sí o sí y que, sin duda, te encantará…
«No hay nada mejor» (especialmente al final de un día largo y duro de pateo y turismo en Japón), que disfrutar tú solo, con pareja, colegas o con desconocidos japoneses (acabarás con alguna anécdota y manteniendo alguna conversación, al igual que ser blanco de muchas miradas, eso seguro xD), de un momento de relax e introspección en alguno de los lugares citados (ofuro, sento, onsen, rotenburo…). En ese momento lo entiendes, entiendes el «poder del onsen» y pasas a estar un poco más integrado en la cultura e idiosincrasia japonesa… y sabrás, desde ese mismo momento, que deseas poder realizarlo todos los días de tu vida.
Yo, de hecho, y hasta el momento en mis 4 viajes a Japón, siempre he procurado hospedarme en algún alojamiento (sea apartamento, hostel, hotel, ryokan o minshuku por ejemplo) que dispusiera de ofuro, sento, onsen o rotenburo (como bien pueden ser el Hotel Sunrise Katsuura en Kii-Katsuura, el Ark Blue Hotel en Kitakyushu, el Centurion Cabin & Spa Kyoto en Kioto, o el Ryokan Kangetsu en Tokio…).
Una vez que lo pruebas vas a querer disfrutarlo siempre que te sea posible, y reitero que se agradece al final del día… Y si no es posible encontrar un alojamiento con tales características, e independientemente de ello, siempre he intentado visitar determinados lugares o complejos donde poder disfrutar de ello (como por ejemplo el Onsen de Kurama, el Oedo-Onsen-Monogatari en Tokio, o el Keio Takaosan Onsen Gokurakuyu en el Monte Takao.).
El onsen es parte de la cultura japonesa desde hace milenios, con una cultura de aguas termales totalmente interiorizada y extendida, obviamente, a lo largo de todo el país y a todo sustrato, estrato y persona de la sociedad, siendo precisamente el lugar donde nos encontramos; en Yunomine Onsen en Kumano Kodo en la Península de Kii, una de las localizaciones más antiguas del país.
Volviendo al onsen, todos y cada uno de ellos tienen sus instrucciones, normas y etiquetas… Aunque, simplificando enormemente y de forma general, podemos indicar que encontramos dos zonas bien diferenciadas; la de ducha para limpiarnos, y la de baño para relajarnos, y es que, primero uno tiene que lavarse y ducharse antes de entrar para así estar bien limpitos, se lleva o te facilitan una pequeña toallita (generalmente utilizada para tapase un poquito si uno es pudoroso o/y ponérsela en la cabeza con agua más fresquita para «compensar temperaturas» xD), hombres y mujeres por separado (también los hay mixtos, aunque son menos habituales), y cuidado con los tatuajes (pueden no permitirte el acceso, aunque se están relajando un poquito y hay lugares donde si eres extranjero te permiten el acceso o/y si es un tatuaje pequeñito te lo puedes cubrir… el tema tatuajes en Japon lleva implícito una serie de características y cuestiones…), y vamos desnuditos (aunque para zonas comunes, fuera de los baños, solemos tener yukata ;)).
Disfrutar de los baños tradicionales de Japón es un auténtico placer y una auténtica delicia para todos los que, como nosotros, no tenemos la costumbre cultural de los mismos más allá del contexto «limpieza» como digo (sí, vale, relajación también), obviando los siguientes pasos: relax, disfrute, introspección, zen… Los baños tradicionales son una experiencia cultural que todos debemos probar y disfrutar en Japón, y que todos echamos de menos por aquí una vez hemos vuelto…
De hecho, siempre que puedo cuando estoy viajando, intento acudir a lugares de concepto similar (salvando las diferencias) para quitarme un poquito el mono… Sea alojándome en lugares como el Single Inn en Kaohsiung, o visitando y disfrutando de los Baños Szechenyi en Budapest, o el Millenium Hot Spring en Taipei… Sin olvidar lugares en España como Orense por ejemplo, donde es posible visitar y disfrutar de lo más parecido a un ofuro, sento, onsen o rotenburo japoneses… O, sin irme más lejos, aquí en Madrid el genial Hammam Al Ándalus.
En fin, cierto es y no obstante, que en Europa y en España podemos encontrar lugares «similares», pero un baño árabe o un spa, por ejemplo y por mucho que me encanten igualmente, son «otra cosa»…
Considerado uno de los manantiales de aguas termales más antiguos de Japón (con unos 1800 años), es, además, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sí amigos, Tsuboyu Onsen es el único onsen de Japón y las únicas aguas y baño termal del mundo con tales características ostentando tal insigne y merecido título. Por lo que, piénsalo bien, te estás bañando y disfrutando de un lugar que es, junto con sus aguas, Patrimonio de la Humanidad… Eso no se puede decir, ni hacer, todos los días… Es un hecho único que, probablemente, solo realices una vez en tu vida.
Y yo, por ello, me sentí y me siento muy orgulloso y afortunado… Sin duda es una experiencia inigualable a tal nivel, que te hace sentir muy muy afortunado por el momento y el lugar vivido y experimentado… Os animo a ver el vídeo en directo y Facebook Live que realicé en el mismo Tsuboyu Onsen, para que podáis vivirlo conmigo y llegar a imaginar mínimamente lo que se puede sentir al bañarse en aguas sagradas que son Patrimonio de la Humanidad :D.
Como no podía ser de otra forma, un lugar de tales características se tiene que disfrutar de forma íntima, relajada y personal… «Tsubo» en japonés significa maceta, jarrón, vasija, recipiente… Y Tsuboyu Onsen es eso; un pequeño recipiente de madera que alberga un onsen en forma redondeada donde pueden entrar y bañarse un máximo de dos personas durante un máximo de 30min (por turnos, no se puede reservar con antelación)… Bañarse en unas aguas que cambian de color 7 veces al día y con distintas propiedades eficaces para distintas patologías y enfermedades.
Y es que no nos podemos olvidar de las propiedades relajantes y curativas del agua de Yunomine Onsen y de Tsuboyu Onsen, reflejadas en ejemplos como la ya citada obra kabuki de «Hangan Oguri y la Princesa Terute», basada en una leyenda del s. XV donde se indicaba que Hangan Oguri sufría una terrible enfermedad que le debilitó hasta morir… Su cuerpo fue sumergido durante 49 días en estas aguas, resucitando de la muerte gracias a las propiedades curativas del agua. Por ello, y más allá del peregrinaje en base a Kumano Kodo o el Templo Toko-ji como indicaba, las aguas de Yunomine Onsen y Tsuboyu Onsen son objeto de visita de todo tipo de peregrinos y personas con diversas afectaciones y enfermedades, en busca de una cura o mejora milagrosa.
Como ya comenté, mi camino a Yunomine Onsen me llevó justo hasta el Tsuboyu Onsen en primer lugar, encontrándome con un panel informativo (en japonés y con un grabado que hace referencia a las aguas termales), y una pequeña marquesina de madera con igualmente varios panales informativos acerca de Yunomine Onsen y Tsuboyu Onsen (indicando también de forma visible el horario del mismo).
A continuación, una escalera de piedra baja hasta el Tsuboyu Onsen propiamente dicho, el cual se encuentra a los pies y sobre el manantial y canal de aguas termales (el canal continua, y unos metros más adelante, siempre de forma paralela a la carretera que atraviesa la población, se encuentra el pozo para poder cocinar comida).
Tras bajar las escaleras, a nuestra derecha un pequeño banco de madera cubierto, donde esperar y descalzarnos, y a continuación el Tsuboyu Onsen en sí; una cabaña y estructura de madera situada sobre rocas y el indicado canal. En la puerta podemos ver diversa información en japonés e inglés (¡incluso en español), indicando por ejemplo dónde nos debemos dirigir a sacar los tickets para nuestro acceso (con una foto) y que: «Este baño de uso privado es para 1 – 2 personas durante 30min. Se trata de un baño en orden de llegada y no hay reservaciones. Por favor, cumpla el tiempo de uso y espere su turno de acuerdo a su boleto numerado. Gracias». Pues eso…
Bien, volvemos a subir, a nuestra izquierda, y cruzamos el pequeño puente sobre el canal, llegando hasta la carretera. Desde aquí, tenemos una vista completa de toda la estructura del Tsuboyu Onsen, incluyendo su tejado y las vigas superiores, sujetadas con varias piedras (entiendo que para que no se muevan, se caigan o se desplacen por las condiciones climatológicas).
¿Cómo comprar los tickets y usar el baño de Tsuboyu Onsen? Todo lo que debes saber de antelación y durante el baño.
- No se puede reservar con antelación en Tsuboyu Onsen, es decir; es en base al orden de llegada… Cuenta con ello para tu planificación, ya que no sabes lo que te vas a encontrar (especialmente en según que fechas), por lo que te puede tocar esperar apenas media hora al tener solo un número delante (como en mi caso, tuve suerte), o te puede tocar esperar varias horas…
- Es un onsen privado para 1 o 2 personas, siendo mixto, por lo que puede estar un hombre y una mujer.
- La duración son 30min desde que accedes, no te pases del tiempo, ya que habrá otra persona/s esperando. Cumple el tiempo de uso y espera tu turno en base a la tarjeta con el número asignado.
- En el interior, no se permite el uso de jabón o champu, ni bañadores o trajes de baño. Igualmente, tienes que llevar tu propia toalla.
- El ticket para acceder a Tsuboyu Onsen permite también el acceso gratuito al baño medicinal kusuri y al baño público sento (frente a la máquina expendedora y ventanilla de los tickets). Yo, por tiempo, no pude probarlos :(.
- Puedes acceder a otros onsen privados o al baño público, por ejemplo, pagando su tarifa correspondiente y de forma independiente al Tsuboyu Onsen.
- Todos los alojamientos existentes en Yunomine Onsen (hay más de 13 alojamientos, incluyendo guesthouse, ryokan y minshuku) disponen de onsen (de pago), y hay tres baños públicos en la población.
- Si necesitas jabón, champú, toalla o amenities varios, se pueden comprar en una pequeña tienda frente al mostrador de tickets.
- Si te mueves en vehículo privado, hay un parking público en la entrada de Yunomine Onsen (está prohibido acampar y cocinar en el mismo).
- Comprar el ticket en la máquina expendedora que se encuentra situada al lado de los baños públicos o sento (al lado del Templo Toko-ji). Está claramente indicado y en inglés, muy fácil de entenderlo (es la que pone «Tsuboyu World Heritage»).
- Una vez comprado, justo a nuestra derecha hay un mostrador de madera con una ventanilla y un cartel superior con diversa información en japonés. A mí me atendió un chico súper majo (hablaba un poquito de inglés y mantuvimos una breve conversación acerca de España y el fútbol, y es que yo llevaba la camiseta del Real Madrid ;)), al que debes entregar el ticket y te dará una tarjeta con un número.
- Te explicará las instrucciones de uso y dónde se encuentra situado el Tsuboyu Onsen.
- Igualmente, te podrán indicar cuántos turnos hay delante de ti, para calcular tiempos.
- Acércate al Tsuboyu Onsen cuando sea tu turno, comprueba si ya está vacío o, en su defecto, qué número está haciendo uso de los mismos (lo veras en el exterior, a la izquierda de la puerta de acceso). El número significa el orden, luego tu deberás colgarlo en el mismo lugar al entrar.
- Dependiendo el número y tiempo, date una vueltecilla, o espera en el banco que encontrarás a tu izquierda.
- Cuando llegue tu turno, debes dejar el calzado en el exterior (bajo el banco, aunque yo me lo quité antes de acceder y lo guardé dentro), colgar tu número, entrar y cerrar la puerta desde dentro.
- Nada más acceder, a tu izquierda o/y derecha, tendrás varias cestas donde debes dejar tu ropa, mochila, pertenencias y demás, es decir; quítate todo aquí.
- Bajas las escaleras (hay una barandilla en la parte izquierda de la escalera para poder sujetarse) y encontrarás un pequeño taburete y la habitual palangana con la que debes lavar y enjuagar tu cuerpo antes de entrar en el onsen, el cual se encuentra a tu derecha.
- Ten mucho cuidado al pisar y moverte por aquí, la piedra puede ser resbaladiza, y no queremos accidentes ;).
- Antes de acceder, comprueba el agua, puede estar literalmente hirviendo (como era en mi caso), por lo que puedes añadir agua fría desde el grifo verde que verás a tu izquierda, y remover el agua con la pala agitadora que encontrarás en el suelo a tu izquierda, y que así se mezcle el agua.
- No te preocupes por mirar el reloj, frente a ti, colgado de uno de los tablones, tienes un reloj para que sepas en todo momento cuándo has entrado y cuándo has de salir.
- ¡Relájate… y disfruta!
Tsuboyu Onsen; experiencia, vídeo en directo e imágenes del interior.
Sí, por fin llegaba el momento… Tras haber cumplido el checklist anterior y seguir todos los pasos al pie de la letra siguiendo la reglamentación, me encontraba desnudito dentro del Tsuboyu Onsen (no sin antes echar agua fría, que estaba hirviendo, y ya bastante hirviendo venía yo como bien se puede ver en las fotos; todo rojo y sudando por la humedad y el calor xD).
Debido a la exposición y el flash, parece que hay más luz de la real en las distintas imágenes. Obviamente, al ser de día y no encontrarte en un entorno completamente cerrado (no hay luz artificial en el interior del Tsuboyu Onsen), la claridad y la luz se colaba entre los tablones de la cabaña, creando un entorno casi místico… Ideal para la relajación, meditación e introspección en conjunto con el sonido del agua del canal que pasa bajo donde te encuentras, y el silencio total y absoluto que había en el exterior (apenas salpicado por algún coche que pasaba, casi inaudible debido al sonido del agua).
Cierto es que los primeros minutos de mi turno los dediqué a sacar fotitos para documentar, y emitir el Facebook Live en la página de Facebook de Viajeros al Blog para, a continuación, olvidarme del móvil y poder disfrutar tranquilamente del lugar privilegiado donde me hallaba… Si no fuera por estos momentos… Si no fuera por estos lugares…
Como ya comentaba anteriormente, uno se siente afortunado de estar aquí… De poder vivir, sentir y disfrutar de tales experiencias, únicas en la vida y que te elevan como persona y como ser en todos los sentidos. Mucho tenía en lo que pensar durante mis 30min, todo el mundo tiene sus problemas en la vida… Y no son ni mejores ni peores, ni más importantes ni menos importantes, ni más graves ni menos graves… Son los míos, igual que tú tienes los tuyos.
Me encontraba cumpliendo sueños como viajero; aprendiendo, desarrollándome, evolucionando… de nuevo, en Japón, muy lejos de mi casa, con una vida complicada y muchos problemas personales en diferentes ámbitos, y con igualmente mucha preocupación por el mismo hecho de no encontrarme en casa ante determinadas situaciones que ocurrían y podían ocurrir…
Ahora lo pienso, estando en este momento en una situación infinitamente peor que en entonces… Y aquel momento entonces oscuro, me parece ahora un derroche de color.
Pero aquel momento, con esa tímida luz atravesando las ranuras de los tablones de la cabaña, me supuso un pequeño oasis en el camino, y pasé a la «no preocupación»… No me preocupaban mis problemas, no me preocupaba la peregrinación, no me preocupaban las aguas medicinales y curativas… Simplemente, y tras fotos, vídeo y muchos pensamientos… intenté relajarme, disfrutar y realizar una pequeña introspección y meditación zazen con el apoyo que también me proporciona ser Maestro de Reiki Usui.
Tsuboyu Onsen me dejó como nuevo y, quiero creer, que sus aguas me ayudaron. Ah, y también la cervecita Kirin que me había comprado antes de entrar, y que me terminé ya dentro del propio onsen ;).
Tras finalizar mi tiempo, me vestí, dejé todo colocado como me lo encontré, y salí… Los siguientes usuarios estaban esperando fuera, era la misma pareja a la que había adelantado durante mi ruta senderista camino a Yunomine Onsen, y que cogieron los tickets después de mí. Nos saludamos sonrientes y les dije: «it’s your turn, enjoy!».
Me senté, me puse las zapatillas y, relajadito (mis músculos lo necesitaban también, no solo mi cabecita), fui a la V-shop a comprar una cestita con huevos, para dirigirme a continuación al Pozo Caliente Yuzutsu y atar la red en el mismo, dejando cocerse los huevos, tal y como comenté anteriormente… Mientras, aproveché para ir a los baños públicos a asearme un poquito, y dar una vueltecita por los alrededores visitando, entre otros, el Templo Toki-ji y la Casa de Té.
Volví, charle con los paisanos, saqué la cestita y me comí los huevos (¡deliciosos!, eran simples huevos cocidos, pero me supieron a gloria)… Y llegó mi hora, el bus que me debía llevar a mi siguiente destino pasaba en breve, así que por seguridad me dirigí a la cercana parada. Esperé, llegó, me monté… y continué mi ruta por Wakayama, la Península de Kii y el increíble Camino Kumano o Kumano Kodo…
Volveré Yunomine Onsen, volveré Tsuboyu Onsen, ¡hasta la próxima!
Información práctica y datos de interés, de Tsuboyu Onsen, en Yunomine Onsen.
Horario: Lunes a Domingos (todos los días del año) 06:00 – 21:30.
Precio: Adultos, 750 yenes. Menores de 12 años, 450 yenes.
Duración de la visita: 30min.
Teléfono: +81735420074.
Información: http://www.tb-kumano.jp/es/onsen/yunomine/.