Cervecería Peronas Travel Bar.
Dónde comer/beber y gastronomía, en Vilnius (Lituania). Cervecería. Opinión y review.
Vilnius era, obviamente, uno de los grandes platos fuertes de la escapada a Holanda – Lituania – Letonia ’17 (8 días)… Ciudad y capital de un país, que venía avalada con el título de Patrimonio de la Humanidad para su centro histórico desde 1994 y que, ya en 2009, había sido la Capital Europea de la Cultura.
Ciudad más poblada de Lituania, es no obstante una ciudad muy manejable, contando que la gran parte de sus atractivos turísticos son visitables a pie. Vilnius tiene mucho que ofrecer, siendo recomendable al menos dos días para poder disfrutar de todos sus atractivos turísticos, no ya solo en su centro histórico como tal, sino en otros lugares repartidos por la ciudad y que nos obligarán a coger sí o sí bus o trolebús para los desplazamientos…
La primera mención escrita de la ciudad data de 1323, considerada fecha de fundación, la ciudad se originó con la construcción de un fuerte defensivo sobre una colina… A principios del s. XVI, Vilnius fue rodeada y fortificada por un recinto amurallado. Hasta 1655, cuando Vulnius fue saqueada y arrasada por los rusos, provocando un éxodo masivo de la misma. Para entonces los rusos ya habían derribado la muralla de la ciudad, y había sido arrasada posteriormente por las tropas napoleónicas en su avancé hacia Moscú.
En la Primera Guerra Mundial, Vilnius fue ocupada por los alemanes, ocupada por los bolcheviques, reconquistada por Polonia, y vuelta a conquistar por los soviéticos, entregándose la ciudad a Lituania, proclamándose un nuevo Estado y anexionándose Vilnius a Polonia, siendo Kaunas la capital de Lituania. Vilnius floreció de nuevo… hasta que la Unión Soviética invadió la ciudad en 1939, volviendo la ciudad a Lituania y como capital de la recién proclamada República Socialista Soviética de Lituania. En 1941 la Alemania Nazi ocupó Vilnius, creándose guetos y siendo asesinados más de 70.000 judíos… En 1944, el ejército soviético recuperó la ciudad y restauró la República…
Tras la Segunda Guerra Mundial, el cambio demográfico en la ciudad fue patente… Así hasta la desaparición de la Unión Soviética, la independencia de Lituania en 1991, y la entrada del país en la Unión Europea en 2015.
Hoy Vilnius es una bella ciudad relativamente moderna y relativamente cosmopolita, con muchos atractivos que, sin duda, satisfarán al más exigente viajero, tanto a nivel cultural y patrimonial, siendo sus construcciones barrocas un auténtico referente. Mucho que ver y mucho que hacer en una ciudad que se reparte entre las amplias avenidas de la Ciudad Nueva, y el recinto amurallado de la Ciudad Vieja, entre el Parque Kalnu y el Barrio de Uzupis… ¡Y no olvidemos las decenas de museos y galerías de arte! :D.
Una ciudad que tiene una reputación muy importante de ocio nocturno a nivel festivo gracias a su multitud de bares y cervecerías… No tuve mucho tiempo para disfrutar de los mismos, pero sabéis que el turismo gastronómico y «ocioso», también es una gran e importante seña de identidad en mis viajes y escapadas, y con la fama de Vilnius en este aspecto, no podía dejar de visitar algunos pubs y cervecerías de la ciudad…
Tras informarme y leer al respecto, fiché varios lugares, uno de los cuales tenía bastantes buenas recomendaciones y opiniones positivas, al igual que presentaba una localización perfecta al encontrarse situado en la misma Estación de Tren de Vilnius y a apenas 5min de mi alojamiento en la ciudad.
Por cierto, y haciendo un pequeño inciso, los alrededores de las Estaciones Centrales de Tren y Bus, no son recomendables una vez ha caído el sol y a altas horas (muy poquita iluminación)… La cantidad de personajes variados y diversos en los alrededores, en busca y captura de “cualquier cosa” es importante, al igual que el nivel de prostitución y, ciertamente, la sensación de seguridad es baja en una zona que, a pesar de su cercanía con el Centro Histórico, se encuentra algo bastante degradada… Precauciones algo más que básicas y cuidadito por aquí, más aún siendo turistas.
Bien, volviendo al tema… El garito en cuestión es el Peronas Travel Bar; una auténtica referencia en el ocio y la noche de Vilnius y que, más allá de la etiqueta de «cervecería» como le he adjudicado en el presente post, es mucho más: bar, restaurante, pub, discoteca, sala de conciertos y eventos… Un todo en uno en toda regla que bien merece una visita en cualquier momento durante nuestra estancia en Vilnius ya que, como indicaba, es muy fácil que pasemos por aquí debido a su ubicación y, al menos como hice yo, poder tomarnos un par de cervecitas…
Tampoco buscaba mucha saturación de peña, ni salir de fiesta por la noche, por lo que aproveché la tarde/noche en la vuelta del día que me acerqué a Kaunas, para tomar algo por aquí…
Abierto desde 2015 (si no me equivoco, apenas he encontrado detalles históricos del local), se encuentra ubicado en un antiguo edificio de almacenes de la Estación de Tren de Vilnius, por lo que no tiene pérdida alguna y es muy fácil de localizar. No está propiamente dicho dentro del edificio principal de la Estación de Tren, pero sí en la misma, y bien podemos acceder a Peronas por dos vías… O entrando en la propia estación, cruzarla hasta el andén y girar a la derecha, o bien, sin entrar a la estación y frente a la misma, dirigirnos a nuestra derecha y tomar frente a nosotros el primer camino que nos encontramos, llegaremos justo al Peronas situado en el edificio de la derecha… No tiene pérdida y es muy fácil de encontrar, si no, preguntas en la estación, te indicarán sin problema ;).
Lo curioso y llamativo, es que el edificio que lo alberga está situado justo en el mismo andén de la estación, es decir; podemos tomar algo mientras vemos los trenes pasar, llegar y salir de la Estación de Tren de Vilnius… ¡qué chulo! Aunque, eso sí, la vía frente a nosotros, con tope, no deja de ser un apeadero, entiendo que no utilizado por ningún tren de transporte de pasajeros o mercancías… Eso sí, he visto fotos donde sí hay un vagón en la vía, ¡lleno de gente bebiendo como si fuera un bar! Sería el vagón cafetería xD.
Bueno, el antiguo almacén es un pedazo de edificio de ladrillo marrón, feo como el solo (bueno, tenía la función que tenía), de cuatro plantas, hoy restaurado y donde en la primera planta y a nivel de calle nos encontramos Peronas Travel Bar… Bien, en el mismo andén, lo primero que nos llama la atención es una enorme estatua de Tony Soprano de casi 3m de altura expuesta en el centro del andén mirando hacia las vías, y que te hace soltar un enorme WTF!, mientras que del tejadillo que cubre el andén cuelgan decenas de pequeñas bombillas, y el mismo andén (la terraza exterior del Peronas propiamente dicho), se encuentra repleta de mesas, sillas, sofás, taburetes, etc…
Cada uno son de su padre y de su madre, todos distintos y con pinta de haber sido «adquiridos» en todo tipo de puntos limpios, basureros, ventas por cierre, etc… Sin duda le da un toque más que curioso (destacan los asientos y mesas creados con cajas de cerveza, también hay barriles y palets xD). Además, todas las mesitas y espacios tienen una pequeña maceta con una plantita, y una taza (también de su padre y de su madre) con agua para poder apagar los cigarros… ¡Muy chulo! Ah, y te dejan mantitas para que puedas estar fuera con el frío ;).
Entramos al Peronas Travel Bar, nos recibe una evidente estructura de antiguo almacén/fábrica completamente restaurado y unos 4m de altura, y es que me encantan estos lugares, abandonados a su suerte en algún momento y en semi ruinas, hoy reconvertidos en toda suerte de lugares artísticos o/y gastronómicos… Amplio y espacioso, frente a nosotros tenemos la graaan barra, pintoresca y realizada en madera (con taburetes de metal, aquí sí, todos iguales xD), y donde encontramos más de 15 grifos de cerveza distintos… Tras la barra, ya en la pared; encontramos las botellas, vasos, carteles con la carta y precios de las consumiciones (no hay carta física) y una decoración algo caótica en forma de todo tipo de cosas colgadas…
A nuestra derecha, se expande el local en sí, bastante diáfano, con algunas paredes pintadas en verde y blanco (con bastantes partes hechas polvo y desconchadas) y otras en ladrillo visto, y donde también encontramos decoración variada y diversa… He de decir que he visto fotos donde el local estaba repleto de mobiliario y con una distribución distinta… Entiendo que lo han cambiado o lo tenían habilitado para algún concierto, fiesta, evento o similar… dejando así todo el espacio como «pista», y más a tenor de que aquí se encontraba situada (a la izquierda al fondo de la sala) una mesa de dj perfectamente habilitada y lista con todo el equipo…
Soy electrónico como bien sabéis, y sí, me molaría mucho darme una fiestecita con música electrónica en este garito, pinta muy bien… Bien, en esta parte, y sobre el espacio habilitado para el dj/actuaciones o tal (también se hacen actuaciones y eventos en el exterior, en el andén), se encuentra un pequeño espacio al que se accede por la escalera a la derecha y donde también tenemos algunas mesas, sillas, sofás y demás… Parece ser que funciona como la «zona VIP».
Por lo demás, bastante iluminación a base de lámparas colgantes, focos y lámparas de pie, plantitas repartidas por todo el espacio en cualquier lugar, varias vigas al aire libre que son parte de la estructura del edificio, cables por las paredes… ¡hasta un piano! Un rollo industrial, vintage, cutre y hipster que, como indicaba, mola mucho y que puede recordar a ciertos lugares del mismo estilo de, por ejemplo, Berlín, Budapest, o incluso Madrid.
En fin… No iba a comer nada en este momento (aunque podía haber aprovechado para cenar, pero tenía algo de picoteo en mi habitación y no quería gastarme más pasta), así que me pedí un par de pintas de cerveza (locales, rubias, de trigo y cebada, que me tomé fuera en el andén). Aunque ciertamente no disponen de mucha cerveza artesanal, la variedad es suficientemente amplia (también en precios) para que todo cervecero quede más que satisfecho y no dude en probar varias opciones… Ya la carta de comida es más limitada, pero disponemos de picoteo a precio asequible: patatas, hamburguesas, perritos y demás… Comida de batalla para un lugar al que, no obstante, no se viene de forma específica a comer… Por las dos pintas pagué 8€, 4€ por cada una… Precio correcto contando el tamaño y que estamos en un garito, pero nada barato para ser una ciudad como Vilnius que, valga lo dicho, tampoco es que sea barata precisamente…
Cuando estuve yo, apenas había gente (nadie en la barra de hecho), y me atendieron rápidamente aunque, cierto es, de forma algo tosca… Cuidado con esto, ya que he leído bastantes opiniones donde se indica que la atención al cliente es bastante lenta y bastante chunga (incluso grosera) en ocasiones por parte del personal (camareros y seguridad), al igual que muchas veces no tienen cervezas de la carta (sea botella o barril)… A mí no me tocó, pero era un momento tranquilo, así que tenlo en cuenta…
También decir que, tanto algún personal como algún cliente, me echaron un par de miradas cuando sacaba fotos… Ese tipo de mirada que no mola (no entiendo por qué, la verdad, parecía que no querían que sacara fotos), y que hizo que optara por no sacar más instantáneas por allí (de ahí las poquitas). Al fin y al cabo soy extranjero, soy turista, y paso de movidas como es obvio… Por lo demás; había wifi gratuito si no recuerdo mal, y limpieza muy correcta :).
Pues nada, un lugar más que auténtico e ideal sin duda para todo viajero, que al final es lo que somos. Peronas Travel Bar es un garito alternativo y agradable, con alma y estilo propio que, sin duda, era muy de mi rollo y que, a pesar de sus defectillos, yo recomiendo al menos para conocer, y al que yo volvería a tomarme algo ;). Además (yo te doy opciones jeje), si quieres salir de fiesta y aprovechar a saco, y tienes que irte o llegar en tren a Vilnius, lo tienes perfecto… ya que puedes pasar la noche de fiesta y coger el tren por la mañana, o llegar por la tarde/noche y hacer noche en el Peronas… Así te ahorras el alojamiento, pero probablemente te gastes más pasta en birras y demás xD.
Información práctica y datos de interés, de la cervecería Peronas Travel Bar en Vilnius.
Dónde está y cómo llegar: Peronas Travel Bar se encuentra situado en Geležinkelio g. 6, Vilnius 02100, Lituania. Está en un antiguo edificio de almacenes de la Estación de Tren de Vilnius, en el mismo andén por lo que no tiene pérdida alguna y es muy fácil de localizar.
Horario: Domingo y Lunes 17:00 – 01:00. Viernes y Miércoles 17:00 – 02:00. Jueves – Sábados 17:00 – 04:00.
Teléfono: +37061674754.
Web: https://www.facebook.com/peronasbaras/