Visitar, qué ver y qué hacer, en Liechtenstein (Balzers, Triesen, Triesenberg, Steg, Malbun, Vaduz, Schaan), Austria (Feldkirch) y Suiza (Chur)
Día 1 – 31.05.09: Liechtenstein (Balzers, Triesen, Triesenberg, Steg, Malbun, Vaduz, Schaan). Austria (Feldkirch). Suiza (Chur). Visitar, qué ver y qué hacer.
CRÓNICA: Día 1 – 31.05.09: Liechtenstein (Balzers, Triesen, Triesenberg, Steg, Malbun, Vaduz, Schaan). Austria (Feldkirch). Suiza (Chur). Casi sin dormir llegaba a Bérgamo, desde donde, por carretera en coche y atravesando Suiza, me planté en el pequeño, verde y precioso a la par que aburrido Liechstenstein. Primera parada en Balzers, visitando la preciosa Iglesia de St Nicholas y el interesante Castillo de Gutemberg, para continuar por Triesen y la Capilla de St Mamertus (la más antigua del país) y Triesenberg, con la inconfundible cúpula de la Iglesia de St Josep Parish. Desde aquí, subiendo por serpenteantes carreteras de montaña hasta Steg (población conocida por sus rutas senderistas), hasta Malbun; población a 1600m de altura de cabañitas de madera en un entorno natural espectacular. El siguiente destino fue Vaduz; la pequeña y limpia capital del país, visitando la Catedral, Casa Roja, Ayuntamiento, Parlamento… para, tras un breve paso por Schaan, dirigirme hasta la cultural y fortificada Feldkirch; ciudad austriaca fronteriza con Liechtenstein. Tras dar vueltas y conseguir aparcar, tocaba recorrer el Casco Histórico con su entramado medieval, sus torres y el Castillo de Schattenburg, Ayuntamiento, Catedral… Finalizando el día volviendo a Suiza y durmiendo en Chur, no sin antes un breve paseo nocturno y una cervecita. ¡Un largo y gran día!
Comienza la crónica de esta nueva escapada… Apenas había dormido unas horitas, me levanté, duché, terminé de preparar las cosas, vino mi hermano a recogerme, al Aeropuerto… y a las 06:20, ya amaneciendo, el vuelo de Ryanair despegaba dirección Bérgamo.
Por suerte el avión no iba muy lleno y pude elegir sitio sin problemas o tumbarme si quería (¡mira que es raro!). Poco a poco comenzamos el descenso, por suerte en esta ocasión, mis tímpanos no sufrieron mucho… Sobre las 08:45 ya estaba en el Aeropuerto… Pequeñito el Aeropuerto de Bérgamo, hay algunas tiendas, restaurantes, Oficina de Turismo de Bérgamo, etc… lo habitual vamos, pero eso sí, un poquito petado como suele ocurrir en este tipo de aeropuertos jeje.
Fui a una de las oficinas de alquiler de vehículos, donde tenía reservado ya un cochecito (están todas juntas, casi frente a llegadas), pero como había indicado que recogería el coche a las 10 (para no tener que hipermadrugar al día siguiente), y todavía no era la hora… pues me dijo el tío que tenía que esperar, mi coche no estaba preparado… Así que nada, busque una cafetería para comer algo (un «bocadillo»; como una especie de pita rellena de jamón, tomate, queso, etc… ¡muy rico!), y luego volví a la oficina… Ahora había tres parejas delante, así que me tocó esperar un ratillo… En fin, después de rellenar el papeleo, explicarme las historias y darme las llaves, sales fuera por la siguiente puerta que te encuentras (a mano derecha de la oficina de alquiler según la abandonas) y justo ahí hay una parada de bus (viene indicado), para coger el shuttle bus (el autobús lanzadera) que te lleva al parking donde están los coches de todas las agencias (está al lado del Aeropuerto, pero son unos 10-15min andando). La verdad es que tardó bastante… hasta el señor que iba detrás de mí para alquilar un coche le dio tiempo a salir y pillar el bus conmigo…
En fin, bus hasta el parking (te deja justo en la entrada), hablo con el chico que está allí y a por mí cochecito jeje. No era otro que un Fiat Panda azul y nuevecito, no tenía muchos km, estaba completamente nuevo y con sus asientos deportivos y demás :D. Ajusto asiento y espejos, pongo el gps, le meto la ruta y nada… camino de Liechtenstein… Di un par de vueltas hasta que me situé y salí a la autopista jeje. Y nada, aquí pasando peaje tras peaje… hay que joderse, más de 9€ me dejé en este tramo con los putos peajes… Pasé al lado de Monza, y un Ferrari rojo (conducido por una espectacular rubia) pasó a mi lado a toda leche jeje (luego me la encontré más adelante en el peaje).
El coche iba perfecto, con su aire acondicionado para ir fresquito (hacía muuuucho calor), y reseñar u detalle curioso… Como el límite de velocidad en autopista en Italia es 130, pues cuando pasas de esa velocidad suena un pitido y en el ordenador de abordo te sale un mensaje que te indica que has excedido el límite de velocidad, curioso jeje. Y así pasó el tiempo… hasta llegar a la Aduana en la frontera entre Italia y Suiza. Había mogollón de tráfico aquí, ya que van parando muchos coches para echar un vistazo y tal… Y ahora el palazo del siglo jeje: según pasas la aduana te dan orden para que pares (no a todos los coches pero sí a casi todos, tampoco me fije, pero creo que «todos» los que paraban tenían matrícula de Italia…), y una chica de la policía suiza me dice, ¡¡¡que tengo que pagar 30€!!! (a mí y a todos vamos). Yo flipando… bueno, paro el coche, me bajo y le vuelvo a preguntar no sea que no hubiera oído bien… Y me dice que sí, que hay que pagar 30€, tasas de aduana y por la «highway»… ¡¡¡y yo flipando!!!, además es que no había leído nada al respecto anteriormente… En fin, no podía hacer otra cosa, así que nada… a pagar los 30€ y a continuar… Alucinando estaba todavía, y mi bolsillo temblando…
Ya estaba en Suiza y continuaba mi camino, pero vamos… 30€ por utilizar la autopista… ni que fuera la puta mejor autopista del mundo, una autovía normal, donde la mitad de los tramos (hasta llegar a Liechtenstein) ¡son carretera convencional de doble sentido!, yo seguía alucinando con el palo que me habían metido por esto… En fin, según iba adentrándome en el país helvético comenzaban a aparecer las grandes montañas, los valles, un poco de niebla y lluvia… y los puertos con curvas muuuy cerradas jeje. Eso sí, los paisajes eran brutales, rodeados de un entorno verde y natural impresionante… Como dije antes, había tramos de autovía/autopista, y otros carretera convencional de doble sentido con un carril por sentido… Suerte que tampoco había mucho tráfico y yo todavía iba bastante bien; sin sueño y cansancio, aunque sabía que éstos no tardarían mucho en comenzar a dar algún pequeño síntoma, y todavía no había parado ni una vez…
Cada vez más montaña y más casitas de madera en las laderas de las mismas… y ya poco antes de llegar a la altura de Chur, decidí parar en un apeadero al lado de la carretera. La verdad es que esto sí está bien montado: hay bastantes apeaderos y áreas de descanso, muchos tienen baños y algún puesto que te venden bebidas y demás :D. En el que paré yo había un puestecito con comida y bebida y unos baños impecables, y mogollón de turistas y autocaravanas (lo que no había prácticamente ninguna, eran gasolineras…). Aproveché para echar una meada, que ya tocaba, y estirar un poco las piernas… que ya tocaba también jeje. Pero nada, 5min y estaba de nuevo en la carretera ;). Pasé Chur (donde iba a venir a dormir luego) y poco a poco me iba acercando a Liechtenstein… Que por cierto, la llegada y los accesos como tal al pequeño país, están súper mal señalizados, no hay carteles que lo indiquen claramente, está «ahí en medio» y como no lleves gps o mapa… realmente no sabes si has llegado o no xD. En fin, el caso es que el gps me llevó sin problemas y, tras pasar por unas carreteras algo malillas y subir (en altitud se entiende), digamos que entré en Liechtenstein «oficialmente» :D.
Liechtenstein es un principado, una monarquía constitucional, un pequeño país centroeuropeo de unos 35.000 habitantes y situado entre Austria y Suiza, que es un paraíso fiscal, y aunque no pertenece a la Unión Europea, sí al Espacio Schengen (utilizan francos suizos, el euro es también aceptado). El actual territorio, primero perteneció a una provincia del Imperio Romano, y posteriormente a la Casa de los Habsburgo, y por la parte de la Casa de Liechtenstein; era una de las casas y familias más nobles de Alemania durante la Edad Media.
Ya a principios de s. XVIII, y debido a varias «compras y fusiones», Liechtenstein se convierte en un estado soberano dentro del Sacro Imperio Romano Germánico, ya que hasta el momento se encontraba bajo régimen feudal, aunque con diversas «dependencias»… las cuales desaparecieron en 1806 cuando el Sacro Imperio fue invadido por Francia.
Tras la I Guerra Mundial, Liechtenstein se unió a nivel monetario con Suiza, más aún con la II Guerra Mundial para mantenerse neutral, aunque colaborando con las potencias del eje a nivel monetario para evitar su invasión.
Hoy, Liechtenstein es un país próspero con economía de libre mercado, cuya base económica es el turismo y las finanzas, destacable también por su tranquilidad, y aburrimiento, y sus impresionantes parajes naturales.
Bien… el tiempo era muy bueno todavía, sol y mucho calor, aunque se notaba que había bajado algún grado la temperatura… Aquí ya «olvidé» el gps, cogí el mapa y la info imprimida que tenía de Liechtenstein y me dediqué a ir a mi bola jeje. El objetivo era cruzar Liechtenstein de sur a norte, entrando por Suiza y saliendo por Austria, haciendo un recorrido obvio por las principales «ciudades» del pequeño país. Nada más entrar en el país seguí las indicaciones de los carteles para entrar en Balzers, la población más al sur y más cercana a Suiza. Según te vas acercando se divisa desde cualquier lugar la Iglesia de St. Nicholas y el Castillo de Gutenberg, hacia donde me dirigía… aparte tenemos también la Capilla de St. Meter un Mals y la Capilla de St. María in Mals, ya un poco más adelante nos encontramos el pueblo, y sin nada que reseñar.
Es muy fácil llegar… y en unos minutos paraba frente a la Iglesia con el coche. Uf, nada más salir me estiré y eché una meada… que ya tocaba jeje, por fin estaba en Liechtenstein e iba a comenzar las visitas… Cansadillo, y todavía me quedaba mucho día… Según entras a la Iglesia, situada a los pies del Castillo, hay un pequeñito pero precioso cementerio… Súper bonito y súper cuidado, muy llamativo ciertamente con esas lápidas desiguales pero ordenadas, y muchas de ellas coloridas… en serio: muy bonito. Apenas había un par de personas dando una vuelta, turistas, una señora echando agua a las flores de algunas lápidas… La Iglesia fue construida en 1972 en estilo neo-románico, no es muy grande ni llamativa, pero sí interesante… y con un pequeño jardín frente a ella perfectamente cuidado :). En fin, tras realizar la visita a la Iglesia, tomé el pequeño sendero que sale junto a la entrada a mano derecha (se puede subir por detrás también), para subir hasta el Castillo de Gutenberg, al que llegas tras unos minutos (sólo es una pequeña subida pero hacía muuucho calor y llegas sudando jeje). Éste fue construido en el s. XI y fue pasando por varias manos hasta que en 1824 lo adquirió la ciudad y finalmente vendido en 1905 a un escultor que lo reconstruyó. Estuvo muchos años funcionando como restaurante y actualmente pertenece al Estado. ¡Buenas vistas tenemos desde aquí!
Y nada, bajé, di una vuelta por el cementerio, cogí el coche y me dirigí a mis siguientes destinos… La verdad es que tenía algo de hambre y tenía mogollón de ganas de tomarme una birra jeje, pero prefería esperar y ya hacerlo más adelante cuando estuviera en la capital… Primero pasé por Triesen, ciudad construida alrededor del año 1150 y donde había vestigios arqueológicos de los romanos… Aquí tenemos la Capilla Románica, la Iglesia de St. Gallus (construida en 1455 con varias pinturas interesantes), y la capilla más antigua de Liechtenstein: St. Mamertus, construida en el s. IX y algo más alejada… Pero vamos, nada que fuera «espectacular» u obligatorio, una pasadita rápida y fuera…
Continué hacia Triesenberg, fundada en el s. XIII y situada a unos 1500m de altura. La ciudad es algo más interesante a nivel turístico que las anteriores, tenemos la Capilla de St. Mary, el edificio del Ayuntamiento y, especialmente la Iglesia de St. Joseph Parish. No tiene pérdida, te la encuentras a mano derecha al lado de la carretera según vas «subiendo», es inconfundible su característica cúpula con forma de «cebolla». Aquí paré un ratito (dejando el coche justo enfrente, donde había un par de restaurantes), y, aunque la Iglesia estaba cerrada y no pude visitarla por dentro, sí estuve un ratillo fuera sacando fotillos y viendo el pequeño cementerio. En este momento… estaba chispeando un poquillo y la temperatura había bajado varios grados, ahora ya tenía la chupa puesta, se nota que estaba cada vez a más altitud…
Continuamos subiendo por carreteras de montaña, vacías y serpenteantes, con un poco de lluvia, pasando por varias poblaciones, hasta llegar a Steg, a 1312m de altitud, población muy conocida por sus rutas senderistas y de esquí. El edificio más importante aquí, en el cual paré para visitarlo obviamente, es la Capilla de St. Wendelin and Martin, de 1721 (situada entre la carretera principal y un pequeño riachuelo). Pero el objetivo era llegar hasta Malbun, la ciudad a más altitud de Liechtenstein y muy conocida por las estaciones de esquí, a 1600m. Joder, qué frío hacía aquí jeje, cuando entré a Liechtenstein hacía un calor bestial, aquí estaba nublado, chispeando y a 7º… Ya no había mucha nieve, pero pude ver la estación de esquí, la multitud de hoteles aquí existentes, y la pequeña Capilla de la Paz, construida en 1950 y a cuyas espaldas había una cumbre nevada en pleno valle. Incluso continué avanzando más hacia el interior, subiendo por una pequeña carretera de montaña donde sólo cabía un coche y lo único que había eran pequeñas (y algunas no tan pequeñas) casitas de madera salteadas en mitad de la montaña y de los verdes y abundantes prados… Unas vistas espectaculares totalmente de postal, un aire completamente fresco, natural y puro, un silencio que te lleva a la introspección… uff, qué bien te sientes en estos momentos :).
Decidí volver, ya que si seguía no tenía ni puta idea de donde podía acabar y ya me estaba metiendo demasiado en montaña por carreteras no muy buenas que digamos jeje. Ahora sí… bajamos por la misma carretera que había subido, con unas increíbles vistas a las que no pude resistirme y tuve que parar para admirar en varias ocasiones… Todas las cumbres nevadas, todo el valle con una naturaleza exuberante, neblilla, diversos ríos… unas vistas sencillamente espectaculares, te sientes afortunado por ver estos paisajes… Y me dirigí hasta Vaduz, la capital del principado de Liechtenstein… (Aquí hacía de nuevo calor, sol y la temperatura había subido casi 20º xD). Uno de los más importantes centros financieros internacionales al ser un paraíso fiscal (cosa que se va a acabar…), sede de numerosos bancos (hay bancos por todos lados ciertamente), cuenta con una población de unos 6000 habitantes… un pueblecillo vamos xD. Al estar situada prácticamente a nivel de mar, el clima es bueno durante todo el año, incluyendo aguas termales y demás que poseen… por lo que visitar Vaduz es una buena opción para el «turista termal» xD. Igualmente, Vaduz es un importante centro comercial, de moda, y donde es posible visitar museos variopintos.
Al igual que en el resto de Liechtenstein, estaba todo súper vacío; completamente desierto vamos, no había nadie por las calles, todo desierto, como un pueblo en pleno invierno jeje. Y ciertamente, con la población de esta ciudad, siendo capital de Liechtenstein, sería un pueblo muy pequeñito en España jeje, pero sin embargo, a pesar de sus 6000 habitantes, sí tiene ese «aire» y «ambiente» de ciudad o/y capital.
Según entras a Vaduz, lo primero que te encuentras es la Iglesia de St. Florins Parish, o lo que sería el equivalente de la Catedral de Vaduz. Construida en 1868 en estilo neogótico, es ciertamente llamativa destacando especialmente esa torre central. Lástima que estuviera cerrada y no poder visitar el interior, pero bueno… Decir que, según llegué, aparqué al ladito de esta Iglesia, al ser Domingo había mucho sitio para aparcar, por lo que me evité tener que meterlo en un parking e, igualmente, pagar «zona verde» jeje.
En fin, ahora me dediqué a visitar la ciudad en sí, el centro vamos, que con un par de horitas (sin entrar en museos) tienes suficiente… Mira que me había informado y lo había leído, pero es así, el centro es tan pequeñito que te lo meriendas rápido jeje. En fin, hice una ruta «circular» por Vaduz, visitando la Casa Roja (la construcción medieval más antigua de la ciudad), el bonito Ayuntamiento de Vaduz (construido en 1932), la Biblioteca Nacional, el interesante edificio que alberga el Parlamento (construido en 1903 en estilo neobarroco), la Oficina de Correos (muy famoso debido al importante desarrollo filatélico del país), el Museo Nacional (que no pude visitar al estar cerrado y donde encontramos una colección prehistórica) y el Museo de Bellas Artes (símbolo nacional de la cultura en Liechtenstein)… Caso aparte es el Castillo del Príncipe, construido en el medievo, aunque posteriormente ampliado con estilos renacentistas y neoclásicos (actualmente el castillo está cerrado), el cual es visible desde todo Vaduz, en lo alto de un acantilado en plena montaña rodeado de vegetación y, todavía, con un poco de nieve. Se puede subir hasta arriba y verlo a pie de carretera… si hubiera tenido más tiempo lo hubiera hecho, pero en ese momento no lo hice… y ya se me pasó…
Lo que hice fue tomarme una birra tranquilamente jeje. Justo en el centro de Vaduz, por la calle principal, hay una pequeña plaza, siendo el único lugar donde había algo de movimiento (aunque poquito igualmente vamos)… Hay un par de hoteles, restaurantes, algunas tiendas… En una de ellas aproveché para comprar un par de recuerdos y me tomé una cervecita muy tranquilamente en una terraza… Uff, ya necesitaba sentarme la verdad, y estaba sediento, necesitaba un poco de zumo de cebada como reconstituyente jeje. Pagué en euros, me devolvieron en francos suizos y continué… (No hay problema en este sentido, aunque Liechtenstein no pertenece a la Unión Europea, y utilizan el franco suizo, el euro es igualmente admitido sin problemas como ya había indicado).
Pues nada, tocaba volver al coche… Pequeñita pero precioso «pueblo» ciertamente: todo impecablemente limpio, todo nuevo y perfecto, acondicionado con varios parkings públicos en el centro, muy manejable y agradable para el recorrido a pie… Eso sí, aquí o vienes en coche o búscate la vida con los buses, ya que no hay tren jeje.
¿Qué hago ahora?, todavía era de día, estaba muy cansado… pero me animé a acercarme a la ciudad austríaca de Feldkirch, la cual hace frontera con Liechtenstein. Antes pasé por Schaan, ciudad pegadita a Vaduz, fundada por los romanos y la ciudad más poblada del país. Es el centro de la actividad económica e industrial del mismo… y esta ciudad sí tiene estación de tren jeje :). Tiene varios museos y varias iglesias reseñables (Iglesia de St. Laurentinus Old Parish, Capilla de St. John, Iglesia de St. Pedro, etc…), pero no me detuve en ninguna, sencillamente hice una pasada echando un vistazo pero sin detenerme más de la cuenta, me interesaba más cruzar la frontera.
Y eso hice, esta todo pegadito y junto jeje, vas por la carretera rodeado de casas y te encuentras la aduana y frontera de repente. Como había policías paré por si acaso, como es obvio vamos… el policía me miró, miró el coche y me dijo que pasara sin más :). Camino de Feldkirch, que está a apenas 10min, ¡¡¡pero no llevaba el gps conectado!!!, así que tuve que dar un par de vueltas hasta encontrar el «centro» (el casco antiguo vamos)… incluyendo una pirula que hice en una rotonda (por la que me pitaron con razón) y dejar el coche en una zona de pago (el equivalente a zona azul o verde)… pero como no lo tenía claro ni encontré ningún parquímetro… pues ahí lo dejé arriesgándome a una multa (o lo que es peor: la grúa) :O.
La verdad es que estaba bastante cansado, y aquí no iba a estar mucho tiempo… Sólo quería dar una vuelta rápida por el centro y las calles principales, sacar unas fotos y fuera: unos 45min-1h vamos. No tenía mapa, pero como esta zona no es muy grande y ya había visto fotos e imágenes anteriormente, y me «sonaban» los sitios, pues no hubo mucho problema…
Decir que Feldkirch es una ciudad bastante famosilla, ya que está muy cerquita de Liechtenstein y Suiza y es un importante centro cultural de Austria. Fue fundada alrededor del 1190 y fue una importante ciudad fortificada durante la Edad Media, por lo que conserva un casco histórico bien conservado con varias lugares interesantes para visitar… Actualmente tiene una población de 30.000 habitantes.
Lo primero que vemos son varias torres que pertenecían a la antigua muralla que rodeaba la ciudad, de planta circular y alguna con todavía pinturas en su ladrillo, dentro de cuyo perímetro encontramos el casco antiguo. Lo más importante y que más llama la atención no obstante, es el Castillo de Schattenburg, una construcción medieval del s. XIII ubicado en lo alto de una pequeña colina, desde la plaza que está justo enfrente, al mirar hacia arriba vemos las torres justo detrás de las casas… preciosa vista, sin duda :). Me acerqué hasta el pero estaba cerrado… (actualmente en su interior alberga un pequeño museo y un restaurante).
Tenemos aquí también el Ayuntamiento; un llamativo edificio con dibujos en la fachada de escudos de armas y soldados, que te hace volver y evocar a aquella época medieval en le ciudad. También tenemos la Catedral Sankt Nikolaus… curiosa, pero nada del otro mundo, sin mucho que reseñar la verdad… Y lo mejor para mí, junto con el castillo, es el «paseo peatonal» y la Plaza del Mercado. Obviamente esta zona es peatonal, con calles empedradas, con muy poquita gente en la plaza (por suerte, para así poder visitarla mejor), y con unas casitas simplemente preciosas. Un lugar acogedor y tranquilo sin duda, me recordaba, en cierta medida y salvando las distancias, a ciertos lugares de Bélgica y Holanda…
Y poco más… me hubiera gustado tener más tiempo aquí, o incluso alojarme en Feldkirch, pero no era la ocasión, estaba cansado y debía irme no sea que me pusieran una multa al coche jeje. La verdad es que si se está por la zona y no os pilla mal, es totalmente recomendable acercarse a esta ciudad… Volví al coche, puse el gps… y ahora sí, camino de mi último destino del día y lugar en el cual iba a pernoctar…
Según crucé de nuevo la frontera, paré para sacarme una fotito con el cartel que anuncia que entrabas en Liechtenstein y para echar una meada entre unos arbustos, que no aguantaba más xDDDD (ahora crucé la frontera sin más, no había nadie…). Bueno, quedaba poco más de media horita hasta llegar a Chur, lugar al que llegué prácticamente de noche… Según entré en la ciudad paré a echar gasolina, ya que estaba a punto de entrar en reserva y así no tenía que echar por la mañana (joder, suerte que el coche consumía muy poquito al ser diesel y poco motor… Igual que antes, pagué en euros y los aceptan sin problemas, y te dan la vuelta en francos suizos jeje).
Chur es considerada la ciudad más antigua de Suiza con unos 5.000 años de antigüedad, está ubicada en un valle del Rin y a lo largo de su historia ha tenido bastantes influencias tanto de la cultura germánica como latina, siendo punto de encuentro de ambas, actualmente tiene una población de unas 33.000 personas y un destacable e interesante casco antiguo medieval ;). Es una ciudad bastante turística, y tiene una animada vida nocturna… La elección de Chur fue casi por «obligación», ya que quería un lugar para dormir de camino a Italia. Así el día siguiente no tenía que madrugar a saco ni comerme otra vez tropecientos km de coche… pero lo único asequible que encontré y que no estuviera alejado de la autopista fue aquí en Chur… Al final resultó ser una buena elección, ¡¡¡y es que una ciudad histórica (y preciosa)!!!
En fin, tras dar un par de vueltas buscando sitio (ya que mi alojamiento estaba situado en el casco antiguo dentro de la muralla y es zona peatonal), encontré un sitio frente a la Oficina de Correos. Había parquímetros, pero al ser Domingo no había que pagar hasta el Lunes a las 8 de la mañana, así que perfecto 😉 (decir también que la Estación de Tren está a unos 15min andando de la Ciudad Vieja, cerca de donde me encontraba).
Mapa en mano me dirigí hasta el hotel, pasando por varios garitos que estaban llenos a reventar… Recuerdo que en uno de ellos, en una mesa fuera, había sentadas dos chicas (turistas pero centroeuropeas vamos), que se me quedaron mirando fijamente y una de ellas me sonrió (¡ay omá qué rica!… y sí, me miró a mí y me sonrió a mí xD). Me quedé un segundo dubitativo… era evidente que yo no era de por allí e iba dando el cante jeje, ¿sencillamente era una sonrisa de «amistad» o porque iba yo solo, con mis pintas de mochilero total y mi cara de cansancio?, ¿o quizás mi planta española y mi pelo largo mecido por el viento le llamó la atención? xDDD.
Estuve a punto de acercarme a saludar al menos, pero seguramente iba a quedar mal jajaja, había mucha gente alrededor, podía meter la pata y mi inglés es sencillamente pésimo… en fin, excusas al fin y al cabo, la verdad es que, sinceramente, estaba tan cansado que lo único que quería era llegar al hotel. Por lo tanto, me limité a devolver la sonrisa y continué mi camino (¡seré gilipollas!). Pensé en volver después por aquí a tomar algo, pero más tarde me asomé a la calle y ya estaban todos los garitos cerrados (esto no es España, todo cierra muy prontito como sabéis), aparte yo estaba hecho polvo… en fin, quizás una, otra, ocasión perdida.
En fin, llegué a mi hotel, cuya review la tenéis aquí con todos los detalles. Subí a la habitación, dejé las cosas, comí algo (que joder, ya tenía mazo de hambre… y llevaba pan de molde y fiambre xD), y me dispuse a dar una vueltecilla por la noche a ver qué tal el ambiente y la Ciudad Vieja… Justo al lado del hotel, y frente a el, hay varios garitos y restaurantes… Mapa en mano me puse a dar una vueltecilla, cuya primera parada era la Catedral jeje. Peroooooo estaba todo tan oscuro y con tan poca luz que las fotos salían fatal, ya que no llevaba el trípode… por lo que decidí irme a dormir y levantarme antes por la mañana. Así visitaría la Ciudad Vieja de día y sin gente, aunque vamos… prácticamente no había nadie por la calle (a no ser gente que salía de algún bar o pub). Aún así, saqué algunas fotillos y me di una vuelta, la verdad es que toda esta zona tenía una pinta estupenda con su callecitas estrechas y empedradas 😀
Pues nada, volví al hotel, pero antes de subir a mi habitación me tomé una cerveza en el bar del restaurante, hablando algunas palabras con la simpática chica que llevaba el bar y que me atendió al hacer el checkin… Tampoco mucho la verdad, porque nuestro inglés, el de ambos, pero especialmente el mío como ya sabéis, no eran muy allá que digamos jeje… Cuando entré, había dos mesas con clientes, me fui el último para variar xD… En fin, subí a la habitación, comí algo again y me dispuse a dormir… Me hubiera gustado ducharme, de hecho es lo que tendría que haber hecho (debía oler un poquito a sudor, pero solo un poquito xD), pero ya era tan tarde y estaba tan cansado que pasé del tema… Sencillamente eché una meada, bebí agua y me metí en la cama, así, del tirón jeje.
Habían sido más de 24h sin dormir, un viaje en avión, más de 350km en coche, varias pateadas, iba a dormir 6 horas como mucho y mañana me tocaba una vuelta en coche de flipar (no os perdáis el siguiente día). Así que… creo que no está mal para un día, ¿no? jaja. Había llegado a Italia, visitado Liechtenstein, Feldkirch en Austria y estaba durmiendo en Chur en Suiza… No sé cómo lo aguanto la verdad xDDD. Un buen y muy largo día, vamos a dormir…
Yo Praga llevo queriendo visitarlo muuuuchos años, pero a la hora de la verdad na de na, todo el mundo falla… Sé que al final tendré que irme solo…
También había pensado ir con Rayanria a Bratislava (desde Gerona), y desde ahí moverse… aparte de Bratislava, visitar Viene y Budapest, o con coche de alquiler recorrer Austria (pero eso ya necesito ir con alguien..).
Bélgica te lo recomiendo, a mí me gusto, con 5 días puedes ver bastante, y si vas un par de días más… puedes ir más desahogado y visitar Luxemburgo! 🙂
Saludos!
Pues no creas que no me lo estoy pensando, eh. Con este dinerillo extra que me voy a sacar (lo puedes leer en mi FB), me estoy pensando en irme en Marzo, que es cuando podré, a algún sitio. Pensaba en hacer Praga, Viena, Salzburgo y lo que se tercie por el camino. O quizá Bélgica, como hiciste tu aunque con algún día extra. Porque como tú dices, no creo que pueda aguantar tanto tiempo sin viajar 😉
La crónica la escribí ayer rapidito… y eso que he "resumido" y no la he revisado (que seguro que habrá cosas que revisar y cambiar jeje), pero ya sabes que siempre se lo agradezco a quien las lee y las sigue 🙂
Yo estoy deseando recorrer Suiza y Austria… lo poco que vi es todo precioso…
Anímate a hacer una escapadilla!, o serás capaz de aguantar hasta tu megaviaje? jeje 😉
Magnífica crónica. Pues sí que te moviste ese día, je. Las fotos ya las vi antes de que pusieras la crónica, todo precioso. Estoy pensando en hacer una escapadilla así antes de dar el gran golpe. Las ganas de viajar no se pueden resistir, jajaja…
A por el siguiente día 😉