Visitar, qué ver y qué hacer, en el Camino de Santiago.
El Camino de Santiago lejos de pasar de moda sigue siendo una de las actividades turísticas y senderistas más elegidas por los viajeros. Muchas personas se preparan durante mucho tiempo para hacer algunas de sus etapas. Otros repiten año tras año para hacer nuevas rutas. Y es que en cada trozo del camino hay nuevas personas por conocer, nuevos paisajes por contemplar y nuevas experiencias por vivir. Por esto no es de extrañar que en el año 2016 más de 270.000 personas recogieran en Santiago de Compostela el documento que dan las autoridades eclesiásticas a los que han completado al menos 100 kilómetros de ruta a pie o 200 en caballo o bicicleta. Todo un récord.
Pero aunque cada vez son más los que quieren sumarse a la aventura, es importante conocer todo lo necesario para prepararse para el Camino. No se trata de una etapa senderista cualquiera. Requiere de preparación física, mental, y organizativa. En este artículo te apuntamos algunos consejos para que puedas prepararte para hacer el Camino de Santiago.
Consejos para prepararte para el Camino de Santiago.
1. Preparación física.
No hablamos de una caminata de dos horas. Para hacer el Camino de Santiago uno debe estar preparado. Es cierto que somos libres de elegir la etapa que queremos completar y el tiempo en que queremos realizarla. De hecho podemos optar para una más corta si no estamos tan preparados. Pero aún así, debemos estar preparados. Estamos hablando, aproximadamente, de caminatas de 20 kilómetros al día de media durante una semana. Por esto es importante haber entrenado previamente.
¿Qué es lo recomendable? Pues bien, lo mejor es que seas una persona activa físicamente, y a poder ser que lleves bastante tiempo realizando actividad física. Pero si no es el caso, al menos debes entrenar dos o tres meses antes de realizar el Camino de Santiago. Pero entonces, y para estar preparado, deberás intensificar el ejercicio y la preparación.
Otra forma de prepararte físicamente para ello, es realizando una recomendable visita médica antes de hacer el Camino. Parece una tontería, pero el Camino desgasta mucho físicamente y necesitamos saber que nuestro cuerpo está preparado para ello. Así que no está de más ir al médico para que nos haga un análisis y nos confirme que podemos hacerlo sin problemas.
2. Prepara la ruta.
Seguramente no tengas todo el tiempo del mundo para hacer el Camino y seguramente tienes algunas preferencias sobre sitios que quieres ver o cosas que quieres hacer. Por esto lo más importante, y también te ayuda a prepararte psicológicamente, es trazar una ruta clara. En esta ruta debemos indicar el camino que seguiremos cada día, los kilómetros que haremos, y las paradas. E incluir los hoteles donde dormiremos, los restaurantes y todos los detalles necesarios.
Y organizar esto significa escoger el tramo del Camino de Santiago que queremos hacer. En este punto recomendamos ser realistas, igual tienes ganas de pasarte 15 días en la montaña, pero ¿lo has hecho en alguna ocasión? ¿Estás físicamente preparado para ello? Si no estás seguro, sé realista, y empieza con una etapa más corta de 100 kilómetros. Y reparte los mismos entre los días que tengas. No te confíes, si el primer día no estás cansado, no hagas aquello de «un poco más». Porque luego el cansancio se acumula a lo largo de los días, así que planifícalo bien y sigue la planificación al pie de la letra.
La mejor manera de preparar el viaje es haciéndolo con Santiago Ways; nos ayudarán a organizar todo el camino.
3. Prepara la mochila con tiempo.
Preparar la mochila significa estar a punto, y esto es lo mejor para prepararnos psicológicamente. El estrés no es bueno, así que tomatelo con calma y con tiempo. Entre otras cosas, porque no se trata de un equipaje cualquiera, sino de una mochila que deberemos arrastrar a lo largo del camino. Ten en cuenta que no debería superar el 10% de tu peso.
Lleva una mochila que sea lo más cómoda posible y donde se pueda distribuir bien lo que lleves dentro. Hay que ser muy racional a la hora de escoger que metemos y no, piensa en llevar solo lo mínimo indispensable. Lo que está claro que no puede faltar en esta mochila es un botiquín de primeros auxilios, ropa adecuada para hacer senderismo y el calzado correspondiente. Muy importante que el calzado no sea nuevo y que lo hayamos probado antes. Si no, podemos arriesgarnos a sufrir ampollas, y eso nos podría fastidiar toda la ruta.
4. Alimentación y descanso.
Igual que debemos hacer ejercicio los meses antes para prepararnos para este esfuerzo, es importante mantener una dieta equilibrada y saludable antes del Camino y durante el mismo. También lo es estar hidratados y descansar muy bien. Evita el alcohol, el tabaco o las comidas grasas los días antes de partir y durante el viaje. Y procura encontrar sitios para dormir donde puedas descansar correctamente. Si no descansas y como es evidente, el día siguiente no rendirás igual y tu cuerpo se resentirá.
Así que ya sabes, lo mejor para hacer el Camino de Santiago es estar preparado. Y sobre todo, informado.